¿Existe algún animal u organismo vivo que no expulse residuos mediante la defecación?
A ver, sé qué todos los seres vivos tienen que expulsar residuos (excretar) pero defecar concretamente sé que lo hacemos las personas, los animales vertebrados y algunos insectos y aquí mi pregunta
Los equinodermos, poriferos, celentéreos y crustáceos, que también son animales ¿Defecan o expulsan los residuos con otro mecanismo?
¿Cómo eliminan sustancias de desecho las bacterias, plantas y protozoos?
1 Respuesta
La defecación es la expulsión de los restos no digeridos de los alimentos ingeridos y luego digeridos. No debe confundirse con la excreción, que es la eliminación del medio interno de las sustancias tóxicas ingresadas con los alimentos o producidas por el metabolismo (expulsándolas al exterior o acumulándolas donde no hacen daño). Hay dos clases de organismos que tragan y digieren alimentos: los animales y los llamados protozoos. Éstos digieren lo que tragan en vacuolas digestivas y expulsan restos, de manera que puede decirse que defecan. En los animales hay que distinguir entre las esponjas y los metazoos. Las esponjas son un caso aparte, porque su nutrición depende de que células especializadas —muy semejantes a los «protozoos» llamados coanoflagelados— capturan, fagocitándolas, partículas alimenticias y microorganismos, expulsando los residuos como cualquier otro protozoo. Los demás animales, los metazoos, en general tragan por la boca y digieren en una cavidad o en un tubo digestivo; en el segundo caso hay un ano y los residuos (heces) salen por el ano, en el otro extremo del tubo. En los que tienen una cavidad con una sola abertura, como los cnidarios o las planarias, la única abertura sirve para tragar y defecar, actúa como boca y ano. La excepción la representan parásitos del medio interno o del tubo digestivo, como las solitarias, que no digieren nada, porque absorben sustancias ya solubles (como las que produce la digestión) del cuerpo del huésped, ahorrándose el trabajo, así que no necesitan tampoco eliminar residuos.
Los animales y los protozoos son organismos fagótrofos (tragan materia orgánica sólida); los demás seres vivos son osmótrofos, absorben agua y sustancias disueltas en ella (también son osmótrofos esos animales parásitos internos que he mencionado antes). Es el caso de las plantas, los hongos o las algas. Éstos, como no digieren sólidos tampoco tienen que expulsar residuos sólidos, así que no defecan.
Ah. Es que por internet dicen que las estrellas de mar, los cangrejos y las gambas no defecan ¿Es cierto?
No. Categóricamente. En las estrellas de mar el ano está arriba (la boca abajo). Los crustáceos decápodos (como gambas y cangrejos) tienen el ano al final del abdomen; al comer langostinos puedes a veces seguir el tubo digestivo hasta el final, debajo, delante del último segmento, rodeado por la musculatura (carne) del abdomen (la «cola»), cuando está lleno de residuos oscuros. En los cangrejos de mar (nécoras y otros), el abdomen (como la cola en la gamba) es plano, echado hacia adelante y pegado al cefalotórax (que es como la «cabeza» en la gamba)
Tengo una nueva pregunta sobre este tema ¿Los miriapodos (ciempiés y milpies) defecan también? Lo pregunto porque he visto las partes de un ciempiés y un milpies, en el milpies sale el ano y en el ciempiés no
Desde luego que sí, descienden de un mismo antepasado que cualquier artrópodo, y también del antepasado común de la mayoría de los animales de simetría primariamente bilateral (lado izquierdo y derecho), con los que comparten tener un tubo digestivo con entrada y salida (en los bilaterales sólo algunos platelmintos y algunos animales reducidos por el parasitismo tienen sólo boca o incluso carecen de digestivo porque absorben nutrientes por la piel) . Cualquier esquema anatómico de un animal complejo declara sólo una parte de los detalles a los que se puede poner nombre; es probable en cualquiera de esos esquemas que se escriban sólo aquellos detalles que son distintivos del grupo ilustrado, o que son de interpretación no obvia, y siempre de aquellos que se ven desde la perspectiva elegida.
En la página 122, la figura 61 de ese libro muestra los tubos digestivos de cuatro quilópodos (ciempiés, Chilopoda) distintos. Hindgut indica intestino posterior o proctodeo (llamémosle recto), y donde éste termina está el ano, lo que, por considerarse evidente, no se ha escrito.
Entonces todo los artrópodos tienen ano y defecan? Es que he visto que las moscas carecen de ano y los insectos que viven poco tiempo no se alimentan, no sé si es cierto
¿La digestión de los moluscos y gusanos también termina en el ano? ¿Donde tienen el ano las tijeretas y lepismas (pececillos de plata)?
Si en los veranos de tu infancia hubieran abundado las moscas tanto como en los míos, no dirías que no defecan. Van dejando circulitos pardos por donde pasan:
https://commons.wikimedia.org/wiki/File:Strontvlieg.jpg
Los insectos tienen un ano que se abre en el último segmento, entre escleritos (son las piezas duras articuladas de la cutícula con las que está construida su armadura-armazón, su exoesqueleto); a saber, un epiprocto encima (detrás, si se abre ventralmente), dos paraproctos laterales (como su boca, no la nuestra, el ano es una ranura longitudinal, no transversal), y un hipoprocto por debajo (delante). Si buscas esos términos (mejor en inglés: epiproct, paraproct, hypoproct), encontrarás ilustraciones y explicaciones. En los «lepismas» (en los Thysanoptera, tisanópteros si lo castellanizamos) el epiprocto es un apéndice largo y fino como los cercos:
https://www.amentsoc.org/insects/glossary/terms/epiproct
No tengo datos específicos de los Dermaptera (dermápteros, tijeretas), pero no veo ninguna razón para suponer que difieran en nada esencial de un insecto típico.
Algunos insectos no se alimentan en su fase adulta, y ello actúa, con los mecanismos propios de la evolución por selección natural, permitiendo que sus órganos bucales se vuelvan incompetentes; pero sí se alimentan durante sus fases larvarias, con un tubo digestivo y una boca completamente funcionales, y seguro que en la última muda, en la metamorfosis, el tubo digestivo no desaparece ni se cierra, aunque no vaya a usarse. No tengo datos precisos, pero me extrañaría que, por ejemplo, las efémeras, tuvieran un tubo cerrado, sin esfínter anal.
La digestión típica no termina en el ano, aunque no excluyo que pueda haber aún procesos digestivos en el recto. La digestión suele ser un proceso complejo compuesto de reacciones químicas (digestión química) y procesos mecánicos (digestión mecánica) que juntos descomponen el alimento ingresado en una solución de moléculas sencillas que deben ser absorbidas. La digestión precede lógica y geométricamente a la absorción, suele empezar en la boca y se extiende a lo largo del tubo, pero va dejando paso a la absorción, que sí se extiende a menudo o en general hasta el ano. En los insectos la excreción está combinada con la función digestiva, porque la filtración ocurre en los tubos de Malpighi, que desembocan donde empieza el intestino posterior (final) y las sustancias excretadas se incorporan a las heces (una de las funciones de nuestro hígado es equivalente, aunque la parte principal de nuestra excreción es cosa de los riñones).
Me sorprende lo concentrado y prolongado de tu interés en lo escatológico de los artrópodos. ¿Es por un trabajo de asignatura?
Es por curiosidad, es que yo tenía aversión a los fluidos corporales y me decían "todos los humanos van al baño" "todos hacemos caca" y yo pensé ¿Sólo hacemos caca los humanos?" "¿Los animales invertebrados no hacen caca o qué? Que suerte tienen" yo pregunto e investigo mucho sobre cosas escatologicas para saber si lo que se considera como tal (heces, orina, mocos, sudor, vómitos) es exclusivo de los humanos o no, y por qué la defecacion se considera tabú, es que de ahí venía mi aversión
Haber empezado por ahí. El tema que te interesa es el asco por los excrementos, incluidos los propios, y otros fluidos corporales. Ese asco es más o menos universal, pero hay diferencias importantes entre unas y otras culturas. La base del asco es un instinto (una reacción o conducta innata) genéticamente determinado (causado) con sede en un lugar concreto del cerebro y sujeto a controles fisiológicos; las mujeres suelen sentirlo con mayor fuerza en relación con la concentración de progesterona, de manera que aumenta durante el embarazo. Como en otras funciones orgánicas, el asco por lo sucio no es igual de fuerte en distintos individuos, por diferencias en los genes causantes y en otros con los que interaccionan. El instinto de aversión por lo sucio, y específicamente por los desechos del organismo, debe tener explicaciones funcionales (adaptaciones evolutivas) sobre las que es fácil especular, pero me parece que hay poca investigación empírica que las haya demostrado; lo más probable es que responda a la evitación de las infecciones, quizá acentuada al hacerse más numerosas y densas las poblaciones con el desarrollo de la economía agraria en la revolución neolítica, el momento en que dejamos de vivir en bandas pequeñas y dispersas abandonando la caza y recolección como modo de vida. También se ha sugerido que alejarse de las heces o enterrarlas disminuye la exposición a los depredadores. Por otro lado, las heces propias no son realmente peligrosas desde el punto de vista de la infección, y los niños pequeños no suelen rechazarlas. Aparte el factor biológico está el cultural. Por razones funcionales parecidas, de higiene, y por la dinámica propia de los ritos y las manías en las comunidades humanas (piensa en el racismo, que no es nada natural) [a este tema se llega con el concepto «meme»] las culturas promueven más o menos ciertas aversiones, y lo mismo las familias. Tu aversión, que valoras como anormalmente excesiva porque no la ves tan aguda en otros, puede tener explicaciones biológicas —tal vez un gen infrecuente— y educativas —tal vez una madre con manía de limpieza—. Lo que más te puede ayudar a librarte de ese agobio, o a aliviarlo, es estudiar los temas asociados para objetivarlos: cuando sabes que un rechazo no está justificado, al menos en ese grado, puedes superarlo; se trata, en otras palabras, de racionalizarlo para controlarlo. Eso es precisamente lo que te ha traído aquí. Se llama terapia cognitiva, y no se necesita las caras consultas de un psicólogo clínico para practicarlo; aunque si llegas a ver el problema excesivo puedas tomarlo en consideración. Las fobias y las aversiones menores pueden combatirse con aproximaciones paulatinas o parciales que te vayan vacunando hasta vencerlas; mi impresión es que la práctica del sexo, al combinar el placer —la evolución biológica nos lo ha puesto para que no olvidemos la perpetuación de la especie— con el roce físico, facilita una cierto ablandamiento de esas aversiones, y existen de hecho parafilias (preferencias sexuales atípicas) en las que los desechos —orina, heces y otros— son herramientas del juego. Para buscar publicaciones sobre lo central de este tema, puedes empezar con el artículo de la Wikipedia en inglés sobre el asco: