Siento que ya no quiero a mi familia tanto como antes ¿Por qué se puede deber esto?
Tengo 18 años, en mi niñez y en mi pubertad discutía con mi familia y siempre sentía que no los quería hasta ahí es totalmente normal. Pero cuando estaba a finales de mis 17 años empecé a tener ese mismo sentimiento pero ahora aún estando tranquilo con mi familia y ya no suelo discutir con ellos, lo siento constantemente en mi día a día. Siento que no soy parte de ellos, estoy hablando de mi familia materna. Siento un vinculo más fuerte con mi familia paterna a pesar de que mi padre no está conmigo desde los 6 años.
Lo que dices al final pudiera explicarlo, precisamente al no tener a tu padre tan cerca, eso pudiera haberte dado lugar a querer aferrarte más a lo suyo, a su familia; y en cambio, quizá la familia de tu madre la has tenido siempre más cerca.
En cualquier caso, no es lo más importante los meros sentimientos, sino que lo importante es que tú los quieras a todos con tu voluntad de buscar el bien de verdad de todos, no buscándote a ti misma en ello, sino que depurando la intención siempre de intereses vanos o desordenados. Tienes que estar en gracia de Dios, tener una vida con sentido; y ayudar a los demás a lo mismo.
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1 - No siento en si dolor por lo que ha pasado a lo largo de los años, sino que es algo que de una noche a la mañana surgió, muchas veces los veo con indiferencia y no entiendo porque sucedió esto.
2 - No siento en si dolor por las discusiones pero si puedo sentir algo de tristeza por el hecho de que soy obsesivo compulsivo y mi familia materna no es tan comprensible y algunos de ellos tienden a burlarse de mí situación, en comparación a mi familia paterna ellos me ayudan a buscar ayuda profesional, me dan animo, etc... Algo que ni mi familia materna y mi propia madre hacen. Mi madre se enoja conmigo cada vez que tengo alguna crisis de pensamientos o ansiedad y es muy impaciente y no puedo hablarle de mis problemas
3 - Con respecto a la familia de mi padre, me siento más comprendido, más seguro, siento que puedo ser quien soy yo con ellos, siento paz, alegría, me siento feliz. Vivo con mi familia materna desde niño pero quiero urgentemente alejarme de ellos y vivir yo solo. Digamos que suelen ser muy tóxicos entre todos constantemente y eso me desespera y siento que no me deja avanzar como persona.
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En lo que me escribes relatas una gran diferencia entre la familia de tu madre y la de tu padre.
Donde te sientes comprendido, apoyado, entendido por la de tu padre, mientras que en el caso de su madre y tu familia, no solo no sientes este apoyo, sino que además de esto sientes que:
- Tu madre no te tiene paciencia, y que no puedes hablarle de tus problemas
- Su familia no entiende la la situación y se burla.
Si tenemos en cuenta todo esto, imagino que el sentimiento que tienes es dolor, ser lastimado y aunque no lo menciones es probable que tengas enojo, rabia y/o resentimiento hacia ella y su familia.
A raíz de todo esto, podemos comprender lo que preguntas, podríamos decir que es muy pero muy posible que tengas sentimientos conflictivos hacia tu madre y tu familia materna.
Por un lado sentimientos positivos tales como: amor, afecto, cariño y por el otro como bien dices, lo que ha pasado te llevó a tomar cierta distancia y a sentir que los quieres menos, por que tienes dolor, sentimientos de incomprensión y posiblemente de rechazo.
Si miramos lo que has escrito y haciendo un resumen podemos identificar que de fondo hay dos problemas, que están muy relacionados el uno con el otro.
¿Sabes cuáles son?
Cito textualmente dos de tus frases:
"Tengo alguna crisis de pensamientos o ansiedad"
"soy obsesivo compulsivo"
Entiendo que lo que lo que ocurre es que cuando entras en estas crisis a tu madre la supera. Y su Familia no comprende lo que te pasa y entonces se burlan.
Tu necesitas una ayuda para poder manejar tus pensamientos, la ansiedad y el estrés que te generan, además del dolor que te produce el no ser entendido y ayudado cuando mas lo necesitas.
Así que no solo, no se soluciona el problema de base, sino que además le sumamos el dolor y la incomprensión que sientes por parte de quienes te rodean.
Es importante que tengas en cuenta que nuestros pensamientos son capaces de generarnos ansiedad, estrés, emociones y sentimientos conflictivos, así como paz, tranquilidad, serenidad y sentimientos positivos.
¿Te imaginas lo que sería tu vida si pudieras manejar y controlar tus pensamientos?
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¿Te imaginas si en vez de tener crisis de pensamientos y malestar, lo que tuvieras es serenidad, tranquilidad y seguridad?
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¿Te imaginas si pudieras sanar las heridas que te ha dejado todo esto con respecto a tu madre y su familia?
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Tienes 18 años y toda una vida por delante. Lo ideal es que puedas estar bien contigo mismo y salir adelante.
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Dejar tus pensamientos obsesivos a un lado y poder disfrutar de tu vida plenamente.
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Te puedo contar por mi experiencia como terapeuta, que es muy diferente estar centrado en lo que uno no quiere, que enfocarse en lo que se desea lograr.
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Lo ideal en estos casos es una Ayuda Psicológica que te permita manejar y controlar tus pensamientos, superar el dolor que te ha generado todo esto, además de todo lo necesario para que puedas sentir bienestar y tener una muy buena calidad de vida y enfocarte en lo que quieres lograr.
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Te comparto los siguientes enlaces
Esa es una etapa completamente normal por la que pasamos en mayor o menor medida todas las personas, forma parte del proceso de crecimiento y de la reestructuración del cerebro que nos impele a poner a prueba los límites y retar a la autoridad.
Si ese sentimiento es excesivo puedes acudir con un psicólogo, consejero o pastor de tu confianza para que ayude a controlarlo.
La naturaleza es implacable. Solo el ser humano atenta en contra de sus leyes y desvirtúa el llamado que hace la vida contradiciendo las fuerzas que nos empujan a sentir determinadas emociones o a querer seguir determinadas sendas. Amar a los padres NO es una emoción para transformarla en cárcel. Se puede amarlos sin tener que esclavizarnos al amor que sentimos por ellos. Se pueden romper las ataduras de lo "establecido" como amor de familia, y ser el mejor hijo del mundo. Ser libre es una de las cosas más importantes. Ser consecuente con lo que uno siente es una forma de ser honesto con los demás. Fingir amor para ser consecuente con la figura establecida (familia, matrimonio, amistad), es una forma de engaño y desprecio por la lealtad (a los padres, al marido o a la esposa, al amigo...).