Entre mi compañía de seguros y mi banco están impidiendo que anule una póliza de hogar.

Tengo un seguro del hogar emitido desde mi banco ligado a un préstamo hipotecario por una clausula del hogar y he decidido cambiarlo.

El seguro vence el 13/07/2013.

Llevo intentando anular la póliza desde el 30 de abril, el mismo 30 de abril fui a informar al banco, a la nueva aseguradora a cerrar el contrato y de nuevo al banco para presentar la clausula de cesión, pero en el banco, ante mi sorpresa, me dicen que es demasiado pronto, que el sistema informático no les habilita la posibilidad de anulación hasta que faltan 2 meses o menos para el vencimiento.

Bien, como la ley de seguros dice que hay que avisar con dos meses de antelación, todavía sin haber cumplido el plazo, le envío a mi aseguradora una carta certificada solicitando la baja (según correos la tienen en su poder desde el 8 de Mayo), aun así, cómo no tengo nada sellado que diga que aceptan la carta, intento anular la póliza por su oficina internet y también telefónicamente, tanto por internet como por teléfono me comentan que al estar vinculada a un préstamo es el banco quien tiene que emitir la anulación, les explico la historia del banco y me vuelven a decir que lo lamentan, pero que es el banco quien tiene que anular.

Volví a pasar por el banco y me volví a encontrar lo mismo, me dicen que hasta la semana que viene no se habilitará la posibilidad de anulación.

Así que, a pesar mis intentos por anular dentro del plazo de dos meses, ya estoy fuera de plazo y expuesto a reclamaciones debido a que entre mi aseguradora y mi banco han impedido que pueda solicitar la anulación en plazo.

¿Hay algo que pueda hacer al respecto para intentar eludir posibles reclamaciones de mi aseguradora?

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Si usted envío carta de anulación de su seguro de hogar a su aseguradora en plazo eso es suficiente. Contrate con la compañía que usted desee y ponga como beneficiaria a la entidad bancaria, a continuación vaya a su banco con la nueva póliza para presentarla y de la orden de que no vuelvan a cargar el recibo de su antigua compañía.

Por desgracia estas prácticas bancarias son bastante usuales con el beneplácito de las autoridades así que mientras los cliente no empiecen a denunciar estos abusos continuarán haciendo lo mismo.

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