He hecho una buena inversión?
Vivo en una casa unifamiliar a 4 vientos. No tengo ruido de tráfico, pero sí de perros ladrando. Y me molesta bastante. Es todo bastante soportable excepto en la habitación principal, donde dormimos, puesto que los perros se levantan muy temprano y se ponen a ladrar. Justamente ayer vinieron a sustituirme las ventanas de esta habitación, que las he cambiado por lo siguiente:
-Carpintería Nazan Domus, panel cajón catalán
-6mm bajo emisivo y cotrol solar/10 gas argón/laminado 4+4 control acústico
En teoría dispongo de un certificado que afirma que este cristal atenúa hasta 41db, mientras que la serie Nazan Domus puede llegar a los 46db. Por tanto, debería estar consiguiendo, al menos, una rw de 41 db. No obstante, me atravería a decir que no noto prácticamente la diferencia con respecto a las ventanas que tenía antes. Tengo la impresión de que está todo bien sellado porque hay eco en la habitación (antes no lo había; es algo que me ha sorprendido), pero la sensación acústica no me ha dejado nada satisfecho.
¿Creeis qué he hecho una mala elección de ventanas? O tal vez debo buscar la causa en otros elementos (fachada, techo...¿)? Estoy dispuesto a cambiar de nuevo los cristales si es necesario, pero siempre y cuando valga la pena. ¿Qué debería haber elegido para dar un salto de verdad?
2 Respuestas
Hola Ignasi!
Desde mi punto de vista, el problema no viene por la ventana o su instalación, sino por que los ruidos, son un problema mucho más difícil de solucionar que los problemas térmicos, y más en una estancia de descanso, donde el nivel de ruido interior baja tanto, que cualquier ruido del exterior se sigue oyendo.
No dudo que tu ventana sea buena, y el vidrio atenúe que lo que te han indicado, pero no es lo mismo un banco de ensayos, con unos parámetros muy controlados, y unos aparatos de medición muy precisos, y con una escala, la de decibelios, que es logarítmica, que la vida real, donde se añade que el ruido no molesta igual a distintas personas.
La solución más efectiva, contra el ruido, siempre pasa por una doble ventana por el exterior, y cualquier solución que apliques a la ventana ya instalada, no va a mejorar, o lo hará muy levemente el problema.
El ladrido de los perros es un sonido de baja frecuencia lo que lo hace más difícil de aislar. Poco ganarías con cambiar de nuevo ventanas o cristales. Lo que dices del eco tiene sentido. Estás hablando de reverberaciôn. Podría ayudar poner una alfombra wall-to-wall. Podrías también probar de poner una cortina gruesa frente a la ventana. Es cuestión de probar. En acústica es el mejor procedimiento. Se trata de ir añadiendo superficies absorbentes hasta conseguir el resultado deseado. Un motivo decorativo de tela de grandes dimensiones en el cabecero serviría también. Habría que ponerle fibra de vidrio detrás. Sinte gusta la idea te diría como hacerlo.
Gracias por tus sugerenias. Tal vez sí que sería una buena idea añadir una cortina gruesa a la pared. El tema del eco no lo decía como algo negativo; no se trata de que el sonido de fuera reverbere en la habitación. Me refería a mi propio sonido, que genera una sensación de eco. Y antes del cambio de ventanas no me sucedía. Esto me hace pensar que las nuevas ventanas están bien selladas y que no existe un problema de montaje.
Empezaste hablando del ruido del ladrillo de los perros. Me parece entender, después de leer tus últimos comentarios, que el problema es el "eco" de los sonidos que emites tu mismo en esa habitación. Son dos cosas distintas. ¿Me aclaras lo que realmente quieres resolver?
Hola! Por supuesto, te lo aclaro. El problema que quiero resolver es el ruido de los ladridos. Hablé de eco para referirme al hecho de que, una vez instalada la nueva ventana, hay eco en la habitación de mi propia voz. Y yo interpreto este hecho en el sentido de que la instalación es correcta y la nueva ventana está bien sellada. Antes no había eco porque la ventana no cerraba bien. No me molesta para nada el eco.
Lo que quiero resolver es el sonido de los perros.
Te va a sorprender mi respuesta. En estos casos hay solo dos soluciones: ponerte tapones en los oídos o esperar a que te acostumbres a ellos. Estā demostrado que con el tiempo (unos meses generalmente) uno deja de oír los ruidos noctunos de baja frecuencia. No eres el primer caso.