Problemas con hijo de 17 años

Hola. Tengo dos hijos, un chico de 17 años y una chica de 19 años. Mi problema es que desde hace un tiempo vivimos una situación difícil ya que mi marido sufre de ansiedad depresión desde hace más de dos años. MI hijo es cada vez más egoísta, nos habla en mal tono e incluso agresivamente, no colabora nada más que cuando se le repite un montón de veces, deja todo por en medio, se duerme tardísimo por la noche, a veces a las cuatro o cinco y por la mañana hay que llamarle muchas veces para que se levante. Gasta todo lo que cae en su mano. Como no estudiaba le dije que dejara el instituto y me ayudara en la empresa familiar ya que mi marido no puede hacerlo y yo no puedo con más obligaciones. Está ayudándome aunque no de forma constante pero a la vez no madura y entiende la situación familiar e intenta ser más comprensivo. Me gustaría saber qué hacer pues esta situación es inaguantable. ¿Debería acudir a un psicólogo?
Gracias y un saludo

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Es evidente que la situación que comentas no es para sostenerla vosotros solos.
Indudablemente una buena asistencia psicológica os vendría muy bien en varios frentes:
1º) Para tu marido, que imagino está siendo tratado con medicamentos pero por tu mensaje no ha seguido ninguna terapia psicológica que pueda ayudarle a manejar las causas de esa ansiedad y depresión.
2º) Orientación sobre el modo y forma de comportamiento de los hijos y de cómo poder manejarla adecuadamente, sobre todo en esas edades tan complicadas.
Es fundamental que primero intentéis solucionar adecuadamente el problema de tu marido para que ambos podáis posteriormetne intentar corregir esos comportamientos, para lo cual ambos debéis estar bien y de acuerdo en las medidas y decisiones a tomar.
Mientras tanto, podréis obtener ayuda de cómo ir afrontando esas actitudes e intentar, estudiando bien a fondo el caso, ir corrigiéndolas en la medida de lo posible.
La terapia cognitivo-conductual suele dar muy buenos resultados en ambos casos.
Ten en cuenta que a veces la vida va aumentando de velocidad y cuando queremos darnos cuenta estamos inmersos en problemas parecidos a los que comentas, y que parecen insalvables, pero si nos paramos un momento, respiramos y vemos las cosa con más calma, podemos comenzar a vislumbrar posibles solucioens que casi siempre llevan aparejadas cambios en nuestras actitudes, expectativas, ideas, etc.
Muchas gracias por tu ayuda. Preguntaré a un médico por la terapia condictivo-conductual e intentaré alejarme por si las ramas no me dejan ver el bosque.

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