No hay ninguna posibilidad de embarazo durante la menstruación ya que como parte del sangrado, se está desechando un óvulo que no está fecundado y aun no existe un óvulo viable que pueda ser fecundado.
Al menos eso es lo que aprendí en mis clases de biología.
La menstruación ocurre debido a cambios en las hormonas del cuerpo. Las hormonas son mensajeros químicos. Los ovarios liberan las hormonas femeninas, que se llaman estrógeno y progesterona. Estas hormonas hacen que el recubrimiento interno del útero (lo que se podría convertir más adelante en vientre materno) aumente de tamaño. El recubrimiento interno va aumentando hasta estar preparado para que un óvulo fecundado pueda anidar en él y empezar a desarrollarse. Si no hay ningún óvulo fecundado, se rompe el recubrimiento y el tejido uterino sale por la vagina en forma de sangre. Este mismo proceso ocurre una y otra vez.
La ovulación es la liberación de un óvulo por parte de un ovario. Las mismas hormonas que hacen que aumente el recubrimiento interno del útero también hacen que un óvulo abandone uno de los dos ovarios. El óvulo se desplaza a través de un tubo estrecho, llamado trompa de Falopio hacia el útero.
Si el óvulo llega al útero y es fecundado por un espermatozoide, se adhiere a la pared del útero, donde se convertirá en un bebé con el paso del tiempo. Pero, si el óvulo no es fecundado, el útero elimina el tejido que recubre su interior y sangra, causando la menstruación.
Por esa misma razón, la menstruación descarta toda posibilidad de un embarazo previo.