Aceptación de una Herencia en caso de conflictos

Tengo 49 años y trabajé durante 20 años (de lunes a viernes) como secretaria de mi padre en su empresa sin cobrar sueldo ni seguridad social, con el compromiso de mi padre de pagarme todo cuando dispusiera de liquidez. Ese pago se fue retrasando por dificultades económicas familiares, quedando pendiente hasta la fecha. Además, con mi padre ya jubilado, durante los últimos 5 años, debido a la crisis, he mantenido a mis padres pagando la mayoría de sus gastos corrientes (comida, agua, luz, impuestos, contribuciones, etc).

Mi madre falleció repentinamente hace 1 año dejando en su testamento 2/3 a partes iguales para sus tres hijos y 1/3 a mi padre, que vive y tiene 82 años.

Al ser mi padre heredero, mi padre disponía por fin de bienes para pagarme la deuda. Sin embargo, uno de mis hermanos llevó precipitadamente a mi padre al notario a renunciar a su parte, con el pretexto de evitar pagar impuestos.

Mi padre, arrepentido de no haber aprovechado su renuncia para mejorarme y saldar así su deuda, ya no tiene bienes. Y mis hermanos, perfectos conocedores de la deuda de mi padre, se niegan a pagármela e incluso a mantener una reunión con mi padre para que él exprese públicamente su voluntad vinculante. Para más complicación, mi padre actualmente está con ellos.

Yo me he negado a aceptar la herencia mientras no se haga constar la deuda en la aceptación de herencia. Sin embargo mis hermanos, si no firmo la aceptación antes del 20 de enero van a demandarme y exigir judicialmente el reparto a tercios, robándome así el trabajo de toda mi vida y siendo probablemente condenada a costas.

Quisiera saber cuál sería la manera más viable de reclamar la deuda o si puedo justificar y argumentar dicha deuda como una carga para no aceptar la herencia en esas condiciones.

Puedo probar todo lo que digo y mi padre lo podría avalar en una hipotética declaración.

Les agradeceré cualquier sugerencia que me ayude a encontrar una salida a la difícil situación en la que me encuentro. Comprendan, dadas las circunstancias, la necesidad de una pronta respuesta.