¿Cría de agapornis mansos?

Perdona la tardanza, las vacaciones de Semana Santa. Bueno, vamos poco a poco con tus muchas preguntas. Sobre los agapornis mansos, sí que suelen ser más dependietes de sus dueños que un periquito, de hecho, sus dueños, los comparan con perros con plumas ;) Los agapornis tienen un fuerte instinto de crianza, por lo que no importa mucho que sean aves que estén domesticadas, me explico. Que no hayan sido criadas a mano, ya que cuando es así, no suelen responder muy bien a la crianza, ya que depende en exceso de su dueño. Pero si sólo están domesticados (vuelan fuera de la jaula, cogen comida de la mano, etc), no hay problema. La pareja amarilla parece una pareja de fisher, pero debe saber que tanto el fisher como el personata, son casi la misma especie, ya que la fisher es una variante natural (no creada por el hombre) del personata, y son perfectamente cruzables entre ellos, produciendo crías fértiles. No pasa igual con estos dos razas, y por ejemplo, el roseicollis, son distintos. Para la domesticación es mejor aves jóvenes (cuanto más mejor), pero si los que tienes son jóvenes y tranquilos, puedes intentarlo. Debes empezar poco a poco y con paciencia, y comienza el adiestramiento, cuando las aves no se pongan nerviosas al verte, que se hayan acostumbrado a tu presencia. Coge a las aves que quieres domesticar, y llevalas a una habitación con puertas y vetanas cerradas (para evitar que huyan). Abre la puerta de la jaula y mete un poco la mano. Solo un poco. Cuando veas que no se ponen nerviosos, metela un poco más. Debes hacer esto unas tres o cuatro veces al día, y sólo durante unos cinco minutos (o menos). Conforme vayas viendo que al meter la mano, no se asustan, introdúcela un poco más. Cuando casi la tengas del todo metida, ofréceles una golosina (fruta) para que coman de tu mano. Cuando lo hagan, intenta poner un dedo sobre sus patas, y debajo de su tripa, para que se sugan a él. Ya puedes sacarlos de la jaula. Suerte. Y otra vez, perdona la tardanza.