Derechos del arrendatario

El arrendador se niega a arreglarnos las goteras del caserío.
Si no se arreglan, nos llueve literalmente encima

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El artículo 21-3 de la LAU te da una salida para este caso:
Comunica fehacientemente a tu arrendador la existencia de esas humedades (no olvides poner que ya se lo habías informado sin que aún se haya solucionado) y añade que dada la grave incomodidad que te suponen es urgente acometer la reparación, y que al amparo del art. 21-3 de la LAU vas a proceder a repararlas a tu costa, y que en cuanto sepas a cuánto asciende y tengas las facturas, procederás a reclamarle los importes que hayas adelantado.
Cuando esté reparado, reclama el importe (otra vez mediante burofax con certificación de contenido y acuse de recibo), si no te lo paga al primer requerimiento, se lo reclamas judicialmente mediante juicio monitorio (no te hará falta abogado ni procurador) presentando como justificación, los dos burofaxes y las facturas de las reparaciones.
Otra opción es poner una demanda para reclamar o que arregle las humedades, o la resolución del contrato, pero entre que sale y no sale la demanda, estarías con las humedades varios meses más...
Mira a ver si aquí te pueden ayudar www.justiciagratuita.com

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