Conservación de frescos

Para conservar la pintura se utiliza un protector o fijativo. El fijativo de silicatos que venden los fabricantes no se deben emplear nunca concentrado, pues no resulta efectivo de esta forma. Hay que diluirlo con agua destilada en una proporción de 1 parte de fijativo por 3 ó 4 partes de agua. El fijativo diluido con agua se pulveriza sobre la zona que se haya pintado al finalizar la sesión de trabajo. Utilice sólo el fijativo necesario para adherir la pintura, de forma que la pared no se quede sobresaturada. El mejor método es utilizar una bolita de papel o tela absorbente para golpear con cuidado la pared después de pulverizar, evitando así que el exceso de fijativo se seque sobre la superficie. Los artistas que utilizan gafas no deben llevarlas puestas cuando estén pulverizando, porque el fijativo puede adherirse a los cristales y estropearlos. Se pueden aplicar varias capas de fijativo cada vez más concentrado, pero con cuidado de que la pared lo siga adsorbiendo. Calcular la cantidad exacta es fundamentalmente una cuestión de práctica. El efecto del fijativo es transformar el pigmento mineral en un silicato duro. Este aglutina la pintura de silicato a los silicatos de la pared. Deja la pared bastante alcalina, de modo que, hasta cierto punto, está protegida de la acción de los ácidos de la atmósfera. Al mismo tiempo, la pared sigue estando porosa para prevenir los desprendimientos de la pintura a causa del vapor de agua.
De todas formas antes de aplicar el protector o fijativo la superficie debe estar suficientemente limpia de suciedad o impurezas.
No obstante aquí le dejo un enlace donde se explica más particularidades del tema.
La pintura mural: su soporte, conservación, restauración y las técnicas modernas
Escrito por Ascensión Ferrer Morales
http://books.google.es/books?id=K99s3ZVkawQC&pg=PA105&lpg=PA105&dq=fijativo+de+silicatos&source=bl&ots=QD6KPePDru&sig=ktRMOhizRpHUwdt1ughdoenxrg&hl=es&ei=xRTvS_mbCIaUOJagvNcH&sa=X&oi=book_result&ct=result&resnum=5&ved=0CBIQ6AEwBA