No siento que vivo, solo siento que sobrevivo.

No se como plantear de modo concreto mi situación, ya que no se bien que de todo lo que me hace sentir en este estado sea el problema central.
Justo a la par de que comencé mi carrera universitaria comencé con síntomas que luego de tres años padeciendolos me diagnosticaron como trastorno de pánico, este trastorno lo padecí junto con mis obligaciones de estudiante, sentía esperanza en el futuro me decía que algún día saldría de eso y que algún día también mi situación mejoraría, esto me malogro mi carrera mucho y pese a ser una persona responsable y con mucha voluntad para esforzarme al máximo, no logre aspirar a muchas oportunidades a las cuales se que si hubiera podido obtener si este trastonro no me hubiera aquejado.
Me puse en tratamiento tanto psiquiátrico como psicológico y así logre estar cuatro añso aproximadamente sin ataques de pánico. Por fin me gradúe, busque opciones de tesis, sin previo aviso los ivestigadores que amablemente me habían dejado desarrollar mi protocolo de investigación me decían no tener tiempo para mi, y sin más volvía a buscar otras opciones de titulación, por fin llegue a un lugar en el cual logre hacer mi tesis, pero en contraparte me maltrataron y humillaron mucho haciéndome sentir que por mi carrera era un ser estúpido, logre titularme, pero mi autoestima salio dañada, ademas de tomarle coraje a mi carrera, que alguna vez tanto me había apasionado. ¿Busque trabajo y en todos los lugares me decían pero que puede hacer un Lic en Biología?, y sin más me cerraban las puertas, así después de muchas cosas llegue al trabajo que ahora desempeño, la docencia, me encanta esto pero la verdad es que no tengo prestaciones y cada curso firmo contrato, no tengo nada seguro. Hace tres meses, tuve una fuerte gastritis y comencé a padecer, estados similares como cuando me daban los ataques, miedo sudoración palpitaciones, pero esta vez mi mente no se alteraba con pensamientos catastrofistas, sin embargo a a pesar de que esta vez si puedo tolerarlos, estos últimos eventos me han vuelto hacer sentir mal, he dejado de salir, me he vuelto a proteger de tod, evito situaciones que puedan alterarme, en fin.
Para esto yo antes de esas nuevos eventos e pánico había planeado ingresar a estudiar enfermería ya que me gusta esa carrera, ademas de la buena paga y del trabajo que siempre hay, me sentía bien y seguro de poderla desempeñar, pero ahora trasncurridos los meses y con estos ataques presentes, no se que hacer, me siento fatal, nada me ilusiona y a veces me deprimo mucho, es un estado constante de cuidarme de permanecer en equilibrio, total que así no siento felicidad de vivir. Ya no puedo apasionarme con nada, y mis planes de estudiar otra carrera se desdibujan cada vez más y lo peor es que se que en este camino no hay muchas opciones para mi, por lo antes mencionado.
Agradezco de antemano la ayuda que me pueda brindar y me diculpo por todo el texto que si bien he juzgado pertinente, se que es demasiado amplio.

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Tu caso no es algo aislado, es lo que se denominó en su día sensibilidad a la ansiedad. O sea, no es tanto que padezcas todo ese cortejo sintomatológico sino que tiendes a interpretarlo de un modo que juzgas como catastrófico, horroroso, deprimente y que te resta valor a ti mismo como persona. Te ves cobarde, aburrido, vencido... y lo peor es que no te das cuenta de que toda esta rumiación que estás padeciendo no es más que un fruto de la evitación constante.
Cada vez que no te enfrentas a una situación, a una persona que te humilla, o a ti mismo como ser cobarde, estás fomentando que el problema se extienda en el tiempo, que se cronifique indefinidamente, y claro, al final te deprimes porque te ves incapaz de afrontarlo y la ansiedad mantenida en el tiempo hace que finalmente nos deprimamos por agotamiento.
Si comienzas a afrontar las cosas en lugar de escapar de ellas, a ver que la ansiedad solo es ansiedad y nada más ni nada menos, y poco a poco vas viendo que de ansiedad no se muere, toda esa rumiación que te atormenta irá desapareciendo y quizá así tu vida comience a tener sentido. El problema es que centras toda tu vida en tus síntomas y así evitas enfrentar lo que deberías de afrontar como un hombre que no es otra cosa que tus miedos.
Piensa en esto en lugar de centrar tu vida en los síntomas, y si los padeces no les des la oportunidad de impedirte hacer una vida, o te encontrarás en tu vejez que te has pasado la vida temiendo como un Woody Allen sin talento a lo que te pueda pasar cuando en realidad no te ha pasado nada.
Si de la otra vez el psicólogo te ha ayudado vuelve y comienza a afrontar ya

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