Dolor agudo en el vientre.
Ayer estaba haciendo el amor con mi novio (con el que llevo dos años y medio), y la postura que habíamos adoptado ofrecía la posibilidad de una penetración profunda. Pero de repente comencé a sufrir un dolor agudo en el vientre que nos hizo parar, que a lo largo del día se incrementaba cuando trataba de levantarme del sofá o cuando andaba. Hoy lo que siento es una molestia más leve, pero estoy preocupada porque este dolor permanece. Me he masturbado y al introducir los dedos y tocar el fondo de mi vagina (la zona que tiene un pequeño agujerito, ignoro su nombre) he dado con el dolor, como si esto fuera la fuente o estuviera cerca. ¿Qué puede pasarme?
1 respuesta
¿Pero hasta donde has llegado con el dedo hasta los ovarios?.
¿Hasta los ovarios? ¿Es eso acaso posible? Tras una breve búsqueda puedo decirle que simplemente es el cuello de mi útero. Un fallo no haberlo buscado antes. El caso es que al tocar ahí, al presionar un poco (porque estaba buscando si era la fuente del dolor) he podido sentir ese dolor, como si la fuente estuviera cerca de esa zona.
¿Pero qué tienes, una fisura en el útero?
No, no tengo una fisura en mi útero. Simplemente al ejercer algo de presión ahí he sentido algo de dolor, un dolor parecido al que sentí ayer, pero que ha cesado sin problemas. Creo que lo importante es centrarse en la causa del dolor que sufrí ayer: Se trataba de un dolor muy agudo y punzante en mi vientre que comenzó con la penetración profunda pero que, en lugar de remitir cuando paramos de realizar el acto sexual, continuó durante todo el día siendo igual de intenso o más cuando tenía que realizar algún esfuerzo. Gracias.
Si ha sido algo excepcional como dices por haber adoptado una postura que te ha penetrado tu novio muy profundamente, podría ser porque estas cerca a la ovulación y tenias la zona un poco inflamada, sino fuera por esta razón, tendrías que pensar en una dispareunia o coito doloroso está incluido en el grupo de las disfunciones sexuales y es el nombre que recibe la aparición de dolor al inicio, durante o después de la relación sexual, este problema puede aparecer tanto masculino, como femenino, aaunque la proporción en hombres está en torno al 4% de la población, la de mujeres se encuentra en el 20%. La mayoría de las mujeres que lo padecen, a la larga van perdiendo interés en su vida sexual, y facilitan la aparición de anorgasmia o deseo sexual inhibido, por lo que sería necesario consultar a un especialista frente a estos síntomas porque existen multitud de tratamientos para este problema.
