Para tomar una Terapia de Reemplazo de Testosterona (TRT) primero hay que averiguar si hay una deficiencia. Esto se logra con un sencillo examen de sangre.
La testosterona es una hormona masculina que cumple un equilibrio muy delicado en el organismo.
Por lo tanto no es recomendable tomarla si no existe una deficiencia, puesto que la testosterona sintética tiene riesgos para la salud.
La testosterona es un esteroide anabólico que utilizan los fisicoculturistas para lograr grandes ganancias de fuerza y volumen muscular. Pero aun cuando estos deportistas los utilizan bajo supervision medica, no están libres de sus efectos secundarios:
La administración en dosis mas altas de las normales puede aumentar la tendencia a la retención de agua y formación de edemas.
La administración prolongada y a dosis altas puede inhibir la producción de espermatozoides.
Al suprimir la testosterona puede presentarse impotencia sexual. La causa es que al administrar durante un tiempo un andrógeno los testículos disminuyen la secreción de testosterona (endógena o interna).
Puede producir ginecomastia, después de un tiempo de administración, sufren un proceso de "aromatización", mediante el cual se convierten en estrógenos (hormonas femeninas). Al aparecer estos estrógenos en el organismo puede producirse la ginecomastia, que es una hipertrofia del tejido mamario, o sea que en el hombre se produce una inflamación o tumefacción de las tetillas, muchas veces acompañada de dolor.
También se han reportado otros problemas como hipertensión, dependencia psicológica, agrandamiento prostático, acné, lesiones musculares y tendinosas, etc. Los esteroides, sobre todo los que se suministran por vía oral, pueden producir daño hepático.
Hay maneras naturales de mejorar la producción de la testosterona sin los riesgos de salud, ver:
11 formas naturales de aumentar la Testosterona