Tras las relaciones sexuales con mi novia me duele la espalda y fallan mis erecciones

Tal como lo cuenta y dado el nik elegido "lutor", que en las películas es, además, de malvado, bastante vago, pienso, sino fuese lo mejor, abstenerse de las relaciones sexuales, a fin de evitar es maldito dolor de espalda.
Si la lumbalgia, ya es de suyo propio, mala de por sí misma, sobre todo por la incapacidad laboral que ocasiona y sobre todo porque se presenta siempre después de un esfuerzo, sea este, mayor, menor, mediano o mediopensionista, lo que es de por sí muy grave, es que, ni siquiera, jodiendo pueda con él.
Pienso que el cuadro que presenta es propio de una invalidez permanente absoluta para toda clase de trabajo y de la capacidad para la coyunda, lo cual la primer parte, puede, que con un poco de suerte, la Seguridad Social lo considere y le de no solo una invalidez permanente, sino, incluso una pensión; pero, si por un casual incluye la segunda de las incapacidades en la invalidez, le veo profesando en un convento, que es donde estos casos tienen un mejor tratamiento, pues pasarse la vida sin echar un polvo, puede ser muy duro.
Imagínese, que por un casual y eso es un suponer, en un recalentón de una siesta veraniega con una paya calentona, en un pajar, accede a la carnal coyunda y pese a los dolores posteriores al feliz acto, engendra un feto, que además se le parece como una fotocopia, a ver ¡Cómo lo explica en la seguridad social, si es inválido para la cuestión de la jodienda!, que en eso de las pensiones son muy suyos los de la Seguridad Social.
Pienso que se esfuerza mucho en cada polvo, como si fuese el último, un poco mesón de esfuerzo, lograría el mismo resultado y dolería menos.
También, la erección se recupera, más o menos rápido, según ha sido la intensidad del polvo, no se agote, tómese las cosas con más calma, tiene toda la vida por delante, para hacer de todo, sin dañarse.
¡Ah!, y no se me cabree, que los polvos se echan en la cama.