Pastillas
Hola, tengo 18 años y fui hace poco a una ginecóloga... Quiero empezar mi actividad sexual pero no sin antes protegerme. Lo que me inquieta es lo siguiente: HE LEÍDO MUCHO ACERCA DE LAS PASTILLAS ANTICONCEPTIVAS Y AL PARECER A LA LARGA PUEDEN PRODUCIR ENFERMEDADES (COMO CÁNCER) QUISIERA SABER SI ESTO ES ASÍ SIEMPRE, ¿y si no es muy recomendable usarlas desde temprana edad (18 años por ejemplo)?
Gracias.
Gracias.
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Respuesta de jromani
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Te mando un saludo cordial e intentaré ser de ayuda para ti.
De acuerdo a la literatura que he revisado, la relación entre cáncer y uso de píldoras es indirecta aunque correlativa. Me explico:
Es indirecta pues no son las pastillas las directamente responsables del cáncer, sino que éste aparece por otros hábitos que a continuación te describiré.
Es correlativa porque a mayor tiempo se use la píldora, mayor es el riesgo de desarrollar cáncer. Sin embargo, este dato sigue siendo indirecto.
La razón aparente, hasta donde sabemos, por las cuales las usuarias de píldoras anticonceptivas tienen mayor probabilidad de tener cáncer, se debe a sus hábitos.
Por ejemplo, dejan de usar condones. Este dato es súper importante. Las personas que usan condón y aquellas cuya pareja está circuncidada, tienen mucha menor probabilidad de padecer cáncer que las que no lo usan o cuyas parejas no están circuncidadas.
El problema, parece ser, se debe a que las personas que han adoptado las pastillas se sienten seguras de que no se presentará un embarazo, que es la cuestión de mayor interés, y se olvidan de otras dos cuestiones: las infecciones sexualmente transmitidas y el esmegma.
Las personas que usan pastillas anticonceotivas son más susceptibles a contraer el virus del papiloma humano, causante principal del cáncer cérvico uterino, principal causa de muerte entre mujeres jóvenes en edad reproductiva en mi país (México).
En lo relativo al esmegma, este es el nopmbre que recibe una sustancia presente en el pene masculino y en la vagina femenina. Se trata de la acumulación de células muertas, sebo, etc., de color blanco o blanco amarillo, que se acumula en la corona peneana y prepucio, y en las mujeres en los labios vaginales.
En fin, que parece ser que el contacto continudo con el esmegma aumenta la probabilidad de cáncer cérvico uterino. Debido a que los varones circuncidados no acumulan esmegma, y los usuarios de condón tampoco entran en contacto directo con él, el riesgo es mucho menor.
Después de esto, me resta tu última inquietud. Las pastillas anticonceptivas, como tales, no tienen una "edad" para comenzar a tomarlas. Sin embargo, en mi opinión, sólo personal de salud experto y profesional puede determinar la conveniencia de iniciar o no un tratamiento con hormonales, de acuerdo a un estudio previo, que consiste en elaborar una historia clínica donde se tomen en cuenta cosas como: tu estado de slaud en general, si en tu familia hay ciertos antecedentes de ciertos padecimientos, y más que nada, si el método hormonal se ajustará o no a tus necesidades de protección.
No pretendo, de ninguna forma, desanimarte a usar las pastillas si es lo que has elegido. En lo personal me encanta la idea de que existan y que la gente las utilice. Mi principal interés reside en que se usen de forma adecuada, que no te causen ninguna complicación en el futuro, y que puedas disfrutar de una vida sexual placentera y sin preocupaciones.
Por ello, te recomiendo que te asesores desde ahora con un ginecólogo, quien tiene la obligación de explicarte todo lo que necesites y darte a conocer tanto el uso correcto de las mismas pastillas como todas sus implicaciones, y en su caso, recetarte las más adecuadas para ti.
Estimada Sexta: discúlpame si me he extendido demasiado. Me interesa ser lo más preciso posible a fin que no te quede ninguna duda.
Sin embargo, si quieres que comentemos más sobre el tema, o tienes otra inquietud, siempre estoy a tus órdenes.
Recibe mis más cordiales saludos, mis mejores deseos y cuídate mucho.
De acuerdo a la literatura que he revisado, la relación entre cáncer y uso de píldoras es indirecta aunque correlativa. Me explico:
Es indirecta pues no son las pastillas las directamente responsables del cáncer, sino que éste aparece por otros hábitos que a continuación te describiré.
Es correlativa porque a mayor tiempo se use la píldora, mayor es el riesgo de desarrollar cáncer. Sin embargo, este dato sigue siendo indirecto.
La razón aparente, hasta donde sabemos, por las cuales las usuarias de píldoras anticonceptivas tienen mayor probabilidad de tener cáncer, se debe a sus hábitos.
Por ejemplo, dejan de usar condones. Este dato es súper importante. Las personas que usan condón y aquellas cuya pareja está circuncidada, tienen mucha menor probabilidad de padecer cáncer que las que no lo usan o cuyas parejas no están circuncidadas.
El problema, parece ser, se debe a que las personas que han adoptado las pastillas se sienten seguras de que no se presentará un embarazo, que es la cuestión de mayor interés, y se olvidan de otras dos cuestiones: las infecciones sexualmente transmitidas y el esmegma.
Las personas que usan pastillas anticonceotivas son más susceptibles a contraer el virus del papiloma humano, causante principal del cáncer cérvico uterino, principal causa de muerte entre mujeres jóvenes en edad reproductiva en mi país (México).
En lo relativo al esmegma, este es el nopmbre que recibe una sustancia presente en el pene masculino y en la vagina femenina. Se trata de la acumulación de células muertas, sebo, etc., de color blanco o blanco amarillo, que se acumula en la corona peneana y prepucio, y en las mujeres en los labios vaginales.
En fin, que parece ser que el contacto continudo con el esmegma aumenta la probabilidad de cáncer cérvico uterino. Debido a que los varones circuncidados no acumulan esmegma, y los usuarios de condón tampoco entran en contacto directo con él, el riesgo es mucho menor.
Después de esto, me resta tu última inquietud. Las pastillas anticonceptivas, como tales, no tienen una "edad" para comenzar a tomarlas. Sin embargo, en mi opinión, sólo personal de salud experto y profesional puede determinar la conveniencia de iniciar o no un tratamiento con hormonales, de acuerdo a un estudio previo, que consiste en elaborar una historia clínica donde se tomen en cuenta cosas como: tu estado de slaud en general, si en tu familia hay ciertos antecedentes de ciertos padecimientos, y más que nada, si el método hormonal se ajustará o no a tus necesidades de protección.
No pretendo, de ninguna forma, desanimarte a usar las pastillas si es lo que has elegido. En lo personal me encanta la idea de que existan y que la gente las utilice. Mi principal interés reside en que se usen de forma adecuada, que no te causen ninguna complicación en el futuro, y que puedas disfrutar de una vida sexual placentera y sin preocupaciones.
Por ello, te recomiendo que te asesores desde ahora con un ginecólogo, quien tiene la obligación de explicarte todo lo que necesites y darte a conocer tanto el uso correcto de las mismas pastillas como todas sus implicaciones, y en su caso, recetarte las más adecuadas para ti.
Estimada Sexta: discúlpame si me he extendido demasiado. Me interesa ser lo más preciso posible a fin que no te quede ninguna duda.
Sin embargo, si quieres que comentemos más sobre el tema, o tienes otra inquietud, siempre estoy a tus órdenes.
Recibe mis más cordiales saludos, mis mejores deseos y cuídate mucho.
Bien, muchísimas gracias por su explícita respuesta. ¿Entonces qué hay de las inyecciones e incluso de esos métodos más recientes como los implantes anticonceptivos? Porque no a el -espegma- no me refería exactamente sino a la sensibilidad de las glándulas mamarias que se produce "según" por el uso de las pastillas, lo cual puede desarrollar cáncer de mama... ¿Esto puede pasar realmente? ¿E incluso con los otros métodos anteriormente mencionados?
Te mando de nuevo un saludo y me da gusto tener noticias tuyas.
En relación a lo que me comentas, puedo decirte lo siguiente:
Me gustaría darte una respuesta definitiva, un sí o un no. Desafortunadamente, la ciencia a veces no avanza tan rápido ni obtiene resultados tan concluyentes como quisiéramos. Te menciono esto porque, con la información que tengo, no hay forma de dar una respuesta definitiva.
Revisé los datos del estudio del Grupo de Colaboración sobre Factores Hormonales en Cáncer de Seno, que es uno de los más extensos elaborados a nivel mundial, y su conclusión es que el riesgo de desarrollar cáncer es ligeramente mayor para las mujeres que toman hormonales ingeridos. En este estudio, se demuetsra que este riesgo regresa a la normalidad después de suspender el uso de los hormonales durante 10 años, excepto en el caso de mujeres que comenzaron a tomar los hormonales antes de los 20 años.
Sin embargo, otro de los estudios más grandes, realizado por Women's CARE, no encontró ningún incremento en el riesgo de desarrollar cáncer mamario, sin importar la edad a la que se comenzó a tomarlos, el tipo de hormonal, las dosis, etc.
En conclusión: unos científicos dicen que el riesgo se incrementa ligeramente y otros dicen que no se incrementa. El primer estudio es de 1996 y el segundo de 2002. En cualquiera de los casos, lo mejor que puedo recomendarte es que aprendas a realizarte la auto exploración de mamas y que la practiques con la mayor frecuencia posible, independientemente que decidas o no usar los hormonales.
Por otra parte, y para ser completamente sincero contigo, mi punto de vista personal en relación a las inyecciones y los implantes es el siguiente:
Los inyectables tienen tres defectos que yo considero graves: el primero es que se inyectan (y yo le tengo pavor a las agujas, así que no imagino a alguien poniéndose la inyección cada mes); el segundo es que, en los últimos días antes de la siguiente inyección, su efectividad disminuye considerablemente, por lo que necesitas un método alterno para usar, digamos, la última semana antes de tu inyección mensual. El tercer defecto grave, es que pueden causarte considerablemente más efectos secundarios que los ingeridos. Pienso que, por todo lo anterior, es que en la actualidad casi no se les usa.
Respecto a los implantes, también debo decirte que es muy frecuente que causen más efectos secundarios, en especial cuando recién te los acaban de poner. Hasta donde yo sé, en este momento existen dos tipos de implantes en el mercado. El más reciente, aunque mejor, sigue teniendo una considerable tasa de rechazo entre las usuarias. Sin embargo, para mayor seguridad puedes consultar este dato con tu médico.
En última instancia, están los parches. Hasta donde la experiencia me lo permite, he visto que son más seguros que los dos anteriores, con la ventaja que solo tienes que aplicarlos una vez a la semana y, hasta donde sé, son mucho más seguros por presentar muchos menos efectos secundarios que la inyección o el implante. En ese sentido, creo que puedes aprovechar y preguntarle a tu médico al respecto.
Pues bien sexta, por mi parte es lo que puedo decirte. Espero que sea de utilidad.
Si tienes alguna otra inquietud o comentario, siempre estoy a tus órdenes. Cuídate mucho y mis mejores deseos para ti.
En relación a lo que me comentas, puedo decirte lo siguiente:
Me gustaría darte una respuesta definitiva, un sí o un no. Desafortunadamente, la ciencia a veces no avanza tan rápido ni obtiene resultados tan concluyentes como quisiéramos. Te menciono esto porque, con la información que tengo, no hay forma de dar una respuesta definitiva.
Revisé los datos del estudio del Grupo de Colaboración sobre Factores Hormonales en Cáncer de Seno, que es uno de los más extensos elaborados a nivel mundial, y su conclusión es que el riesgo de desarrollar cáncer es ligeramente mayor para las mujeres que toman hormonales ingeridos. En este estudio, se demuetsra que este riesgo regresa a la normalidad después de suspender el uso de los hormonales durante 10 años, excepto en el caso de mujeres que comenzaron a tomar los hormonales antes de los 20 años.
Sin embargo, otro de los estudios más grandes, realizado por Women's CARE, no encontró ningún incremento en el riesgo de desarrollar cáncer mamario, sin importar la edad a la que se comenzó a tomarlos, el tipo de hormonal, las dosis, etc.
En conclusión: unos científicos dicen que el riesgo se incrementa ligeramente y otros dicen que no se incrementa. El primer estudio es de 1996 y el segundo de 2002. En cualquiera de los casos, lo mejor que puedo recomendarte es que aprendas a realizarte la auto exploración de mamas y que la practiques con la mayor frecuencia posible, independientemente que decidas o no usar los hormonales.
Por otra parte, y para ser completamente sincero contigo, mi punto de vista personal en relación a las inyecciones y los implantes es el siguiente:
Los inyectables tienen tres defectos que yo considero graves: el primero es que se inyectan (y yo le tengo pavor a las agujas, así que no imagino a alguien poniéndose la inyección cada mes); el segundo es que, en los últimos días antes de la siguiente inyección, su efectividad disminuye considerablemente, por lo que necesitas un método alterno para usar, digamos, la última semana antes de tu inyección mensual. El tercer defecto grave, es que pueden causarte considerablemente más efectos secundarios que los ingeridos. Pienso que, por todo lo anterior, es que en la actualidad casi no se les usa.
Respecto a los implantes, también debo decirte que es muy frecuente que causen más efectos secundarios, en especial cuando recién te los acaban de poner. Hasta donde yo sé, en este momento existen dos tipos de implantes en el mercado. El más reciente, aunque mejor, sigue teniendo una considerable tasa de rechazo entre las usuarias. Sin embargo, para mayor seguridad puedes consultar este dato con tu médico.
En última instancia, están los parches. Hasta donde la experiencia me lo permite, he visto que son más seguros que los dos anteriores, con la ventaja que solo tienes que aplicarlos una vez a la semana y, hasta donde sé, son mucho más seguros por presentar muchos menos efectos secundarios que la inyección o el implante. En ese sentido, creo que puedes aprovechar y preguntarle a tu médico al respecto.
Pues bien sexta, por mi parte es lo que puedo decirte. Espero que sea de utilidad.
Si tienes alguna otra inquietud o comentario, siempre estoy a tus órdenes. Cuídate mucho y mis mejores deseos para ti.
