Ayuda con niños,
Hola que tal loulou, mi nombre es José Luis, de ante mano te doy las gracias por leer esta carta, soy instructor de karate, y el problema es el siguiente, acabo de entrar a una institución, que es algo así como una guardería, y en ella les doy clases de carate a niños de 3 a 5 años, bueno, yo le había dado clases a niños chiquillos, pero en una escuela de karate, cuando entra un niño mínimo es de 4 a 5 años y no hay problema pues esta conviviendo con niños más grandes y como resultado ese niño o niña pone atención en clase se adapta pero en el caso de esta guardería, pues primero le doy clases a un grupo de maternal, luego a 3 grupos de preescolar, y se hace el desorden, como le ago para controlar a tanto niño, 2- necesito si tienes tiempo que me proporciones las definiciones de las palabras que ustedes usan en este campo de educar niños, eje: capacidades coordinativas, cognoscitivas, etc y si estas se dividen pues también eje: coordinación gruesa, fina, óculo manual todas las que sepas por favor, pues ayer tuve un pequeño tropezón, y bueno me hablaron con estas palabras y unas otras más y para mi era como si me hablaran en hebreo, ósea en pocas palabras proporcióname todas las definiciones que sepas, o páginas de Internet de donde encontrarlas, y por ultimo quisiera tomar un curso especial de educación física, pero como se les llama a ese tipos de cursos específicos para niños, es todo, otra vez gracias por tu ayuda y por dar un poco de tu tiempo al leer esta carta, espero tus respuestas, en verdad la necesito, atentamente. José Luis
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Respuesta de loulou
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Ante todo disculpa los días que he tardado en contestarte, ya sabes, final de curso con todos los papeleos y reuniones de evaluación, y por ende algo fallaba en mi conexión a la red.
Vamos por partes ya que tus preguntas son muchas. En primer lugar en cuanto a como manejar a los niños tan pequeños, para que hagan caso y la clase no sea un desmadre absoluto, sólo hay una solución: deben estar "enamorados" de ti. Es decir, debes tener la capacidad de fascinarlos, de tal modo que te sigan a todo lo que hagas. Un buen comienzo es no pretender dar clase el primer día, sino dedicarlo a jugar con ellos, ir descubriendo sus intereses, y cómo son cada uno de ellos. Te propongo que organices algún juego dónde, a través de la psicomotricidad, puedas ir descubriéndolos. Puede ser una historia tipo cuento, en la que ellos deban realizar alguna actividad motriz ( gateo, arrastrado, oseo, salto con los pies juntos, salto desde una altura de unos 30-60 cm. En función de la edad...). A mis niños les gustaba mucho la historia de los piratas. Yo me ponía un sombrero pirata y un parche pintado en el ojo, y llegaba diciendo que todos los marineros de mi barco habían enfermado, y que yo tenía que llevar mi barco a otro puerto, pero necesitaba ayuda. Les proponías si ellos querían ser mis grumetes, a lo que contestaban muy ilusionados que sí, pero para ello debían pasar una serie de pruebas (monta un circuito por dónde deban arrastrarse, gatear, saltar...) una vez pasadas las pruebas, conseguían su parche (pintado en el ojo, con maquillaje de colores). Puedes inventar cualquier otra historia de este tipo, y seguro que te seguirán. Cuando introduzcas el karate, también lo puedes hacer contando alguna historia de este tipo. Verás que bien funciona.
Por otro lado, también deben tener claro que quién mandas eres tu, y se hace lo que tu digas. Para ello castiga a alguno si es necesario: adviértele primero, que si no se porta bien lo castigarás, y di un no rotundo frente a las situaciones que no deban producirse, acompañado de una cara de enfado. Si no obedece, lo pones cara a la pared, contando hasta tres, y luego se les dice: "Yo te quiero mucho, y te querré siempre, pero si haces... me enfado".
Ten por seguro que con esta actitud, los riñes y castigas cuando hace falta, pero también se divierten mucho contigo, conseguirás fascinarlos, y te querrán mucho, con lo cual harán todo lo que tu digas. Debes tener en cuenta que los niños tan pequeños deben sentirse muy queridos, no repares en demostraciones de afecto, abrazándoles y besándoles siempre que lo consideres necesario, especialmente después de haber reñido alguno. Para que un niño crezca sano y feliz, debe tener límites a su conducta, pero sentirse muy querido.
En cuanto a esas palabras que desconoces, te aconsejo que compres algún libro básico de Educación Infantil, aunque no me atrevo a recomendarte ninguno, ya que los que yo conozco son demasiado complejos. Te envío de todos modos los parámetros más básicos a trabajar en Infantil, con lo que significan y como se pueden evaluar, quizá eso te ayude a entenderlos mejor.
-Psicomotricidad
Definimos la psicomotricidad como aquella aptitud que posee el cerebro humano y que le permite convertir todos los estímulos que alcanzan el umbral de excitación de las células nerviosas en impulsos neuromotores.
En cada nivel el niño-a se manifiesta como una unidad funcional donde el movimiento y el desarrollo psíquico no son más que dos eslabones de la misma cadena de identidad y desarrollo; el tono, la contracción refleja, que equivale a la respuesta motora simple, y la coordinación motora voluntaria, que equivale a una respuesta motriz coordinada y automatizada, son las tres formas básicas con las que el sistema muscular se integra en la unidad funcional de este ser que hace del movimiento un elemento esencial de comunicación.
El tono muscular es el resultado de una contracción continua, es un reflejo inconsciente y permanente que el manto muscular adopta ante los estímulos. Cuando por la causa que fuere el tono se ve empujado fuera de sus límites armónicos, aparecen dos formas patológicas: la hipotonía y la hipertonía.
La contracción muscular refleja equivale a la contracción intermitente de la musculatura estriada o de la musculatura lisa, ¿qué se origina en impulsos eléctricos nerviosos de los que él? ¿Yo? No es consciente.
Los actos automáticos son aquellos que un día tuvimos que aprender, prestándoles toda nuestra atención y que hoy podemos hacerlos sin darnos cuenta, sin prestarles atención. Pero para ponerlos en marcha hace falta un acto de voluntad, aunque sea de voluntad implícita y no explícita.
Por último, los actos motores de voluntad explícita, son actos de contracción muscular a los que el sujeto presta atención y concentración mental.
Teniendo en cuenta todo esto, dividiremos la psicomotricidad en motricidad gruesa y motricidad fina, a fin de poder valorarlas y trabajarlas en su globalidad, pero también de modo independiente si ello nos interesa.
La motricidad gruesa hace referencia a la regulación y funcionamiento de los grandes movimientos, e incluye el equilibrio, agilidad y coordinación. Por equilibrio entendemos la consecuencia de una maduración adecuada del tono muscular: posturas correctas, simetría, capacidad de sostenerse de puntillas, a la pata coja...
La agilidad es la capacidad de movimiento (arrastrado, gateo, caminar, andar a la pata coja, saltar...), y la coordinación es la sincronía contralateral de brazos y piernas, la automatización y la adaptación a un ritmo.
La motricidad fina es la regulación y funcionamiento de los movimientos referentes al brazo, mano y dedos; y en ella tenemos en cuenta la destreza, el gesto gráfico y la creatividad. La destreza es la movilidad, elasticidad, rigidez, dominio del brazo, codo, muñeca, mano y pinza. El gesto gráfico se refiere a la maduración, dominio, relleno y direccionalidad; mientras que la creatividad es la capacidad de expresar a través del dibujo la realidad, sus fantasías y sus sentimientos.
-Percepción
Cuando hablamos del parámetro que denominamos percepción, nos referimos en todos los casos a la capacidad de integrar mensajes sensoriales en esquemas de conocimiento. Asistimos a lo largo del proceso de desarrollo del niño-a una constante evolución en su capacidad perceptiva. Las sensaciones que recibe, aun siendo las mismas, son integradas, reconocidas o identificadas de forma distinta en cada momento de su evolución.
Las variaciones que a lo largo de su evolución se presentan en su capacidad de percepción, vienen determinadas por la mayor riqueza en el número de conexiones interneuronales. El aumento de estas conexiones es consecuencia de la llegada de estímulos adecuados a cada uno de los captadores de información y del propio proceso de desarrollo.
La percepción es una relación del sujeto con el objeto; este posee sus características propias, pero el individuo lo percibe en su objetividad. En su forma de aprehender, proyecta su forma de ser, modelado por sus experiencias anteriores, el medio al que pertenece y por sus motivaciones.
El cenit de la función cerebral, en el que la percepción y su desarrollo son elementos fundamentales, es la formación de los conceptos abstractos.
El concepto es un símbolo abstracto y general que representa la suma de todos los conocimientos que poseemos sobre una serie de sensopercepciones. Permite evocar las propiedades o características del tipo de cosas o seres que simboliza y que diferencian a este tipo de otros.
Un concepto es la elaboración de un conjunto de experiencias. El soporte de los conceptos son las palabras. A cada una de las representaciones mentales que posee el cerebro le corresponde un código verbal. Pero no debemos olvidar que para llegar a la verbalización de una manera adecuada es muy importante que antes se haya formado ya una representación mental sensoperceptiva. Cuanto mayor y mejor sea el nivel perceptivo alcanzado, mayor será la posibilidad de consciencia y de vivir conscientemente el entorno y a nosotros mismos.
En el desarrollo de la percepción y la consciencia, es muy importante tener en cuenta la esfera de la emotividad, pues la carga emocional que está ligada a los estímulos, contribuye de forma importante a que estos sean percibidos e integrados de una u otra forma. Es uno de los factores importantes que contribuyen a que el concepto que tenemos del mundo que nos rodea y él nuestro propio, tengan uno u otro matiz y que las estructuras de nuestro propio yo se organicen en una u otra forma.
Dentro de la percepción, incluiremos pues el conocimiento y desarrollo del lenguaje (articulación, fluidez, expresividad, capacidad de diálogo y de comunicación), las nociones básicas (forma, color, tamaño, grosor y cantidad), y el esquema corporal (Conocimiento vivenciado de las partes del cuerpo, asimilación de las nociones básicas de organización del espacio, arriba-abajo, delante-detrás, izquierda-derecha).
-Adaptación, Ritmo y Control de inhibición.
Este parámetro hace referencia a la capacidad de adaptación de los niños-as a nuevas situaciones, a sus modos de afrontarlas y a la riqueza o pobreza de sus respuestas frente a ellas. También hace referencia a la regularidad en la consecución de sus tareas, constancia, precipitación, etc., y por último a su capacidad de obediencia.
Valoramos en este parámetro tanto los hábitos personales de aseo, higiene, orden, como los hábitos de comportamiento, las conductas y su problemática, y la convivencia con sus compañeros-as, con sus educadoras.
Si no entiendes alguna de estas palabras, primero siempre diccionario, y sino ya sabes dónde encontrarme, estaré encantada de ayudarte.
Quizá también te pueda interesar una web dónde puedes encontrar mucha información y dónde puedes encontrar otros profesionales que te ayuden: waece.com, que es la página de la Asociación mundial de Educadores Infantiles.
En cuanto a los cursos de Educación física que me comentas, no tengo ni la menor idea, y tampoco he conseguido ninguna información. Lo siento.
Espero haberte servido de ayuda, y si tienes dudas o quieres explicaciones más sencillas, ya sabes dónde encontrarme.
Muchas suerte con los niños y recuerda, mucha disciplina con mucho amor.
Vamos por partes ya que tus preguntas son muchas. En primer lugar en cuanto a como manejar a los niños tan pequeños, para que hagan caso y la clase no sea un desmadre absoluto, sólo hay una solución: deben estar "enamorados" de ti. Es decir, debes tener la capacidad de fascinarlos, de tal modo que te sigan a todo lo que hagas. Un buen comienzo es no pretender dar clase el primer día, sino dedicarlo a jugar con ellos, ir descubriendo sus intereses, y cómo son cada uno de ellos. Te propongo que organices algún juego dónde, a través de la psicomotricidad, puedas ir descubriéndolos. Puede ser una historia tipo cuento, en la que ellos deban realizar alguna actividad motriz ( gateo, arrastrado, oseo, salto con los pies juntos, salto desde una altura de unos 30-60 cm. En función de la edad...). A mis niños les gustaba mucho la historia de los piratas. Yo me ponía un sombrero pirata y un parche pintado en el ojo, y llegaba diciendo que todos los marineros de mi barco habían enfermado, y que yo tenía que llevar mi barco a otro puerto, pero necesitaba ayuda. Les proponías si ellos querían ser mis grumetes, a lo que contestaban muy ilusionados que sí, pero para ello debían pasar una serie de pruebas (monta un circuito por dónde deban arrastrarse, gatear, saltar...) una vez pasadas las pruebas, conseguían su parche (pintado en el ojo, con maquillaje de colores). Puedes inventar cualquier otra historia de este tipo, y seguro que te seguirán. Cuando introduzcas el karate, también lo puedes hacer contando alguna historia de este tipo. Verás que bien funciona.
Por otro lado, también deben tener claro que quién mandas eres tu, y se hace lo que tu digas. Para ello castiga a alguno si es necesario: adviértele primero, que si no se porta bien lo castigarás, y di un no rotundo frente a las situaciones que no deban producirse, acompañado de una cara de enfado. Si no obedece, lo pones cara a la pared, contando hasta tres, y luego se les dice: "Yo te quiero mucho, y te querré siempre, pero si haces... me enfado".
Ten por seguro que con esta actitud, los riñes y castigas cuando hace falta, pero también se divierten mucho contigo, conseguirás fascinarlos, y te querrán mucho, con lo cual harán todo lo que tu digas. Debes tener en cuenta que los niños tan pequeños deben sentirse muy queridos, no repares en demostraciones de afecto, abrazándoles y besándoles siempre que lo consideres necesario, especialmente después de haber reñido alguno. Para que un niño crezca sano y feliz, debe tener límites a su conducta, pero sentirse muy querido.
En cuanto a esas palabras que desconoces, te aconsejo que compres algún libro básico de Educación Infantil, aunque no me atrevo a recomendarte ninguno, ya que los que yo conozco son demasiado complejos. Te envío de todos modos los parámetros más básicos a trabajar en Infantil, con lo que significan y como se pueden evaluar, quizá eso te ayude a entenderlos mejor.
-Psicomotricidad
Definimos la psicomotricidad como aquella aptitud que posee el cerebro humano y que le permite convertir todos los estímulos que alcanzan el umbral de excitación de las células nerviosas en impulsos neuromotores.
En cada nivel el niño-a se manifiesta como una unidad funcional donde el movimiento y el desarrollo psíquico no son más que dos eslabones de la misma cadena de identidad y desarrollo; el tono, la contracción refleja, que equivale a la respuesta motora simple, y la coordinación motora voluntaria, que equivale a una respuesta motriz coordinada y automatizada, son las tres formas básicas con las que el sistema muscular se integra en la unidad funcional de este ser que hace del movimiento un elemento esencial de comunicación.
El tono muscular es el resultado de una contracción continua, es un reflejo inconsciente y permanente que el manto muscular adopta ante los estímulos. Cuando por la causa que fuere el tono se ve empujado fuera de sus límites armónicos, aparecen dos formas patológicas: la hipotonía y la hipertonía.
La contracción muscular refleja equivale a la contracción intermitente de la musculatura estriada o de la musculatura lisa, ¿qué se origina en impulsos eléctricos nerviosos de los que él? ¿Yo? No es consciente.
Los actos automáticos son aquellos que un día tuvimos que aprender, prestándoles toda nuestra atención y que hoy podemos hacerlos sin darnos cuenta, sin prestarles atención. Pero para ponerlos en marcha hace falta un acto de voluntad, aunque sea de voluntad implícita y no explícita.
Por último, los actos motores de voluntad explícita, son actos de contracción muscular a los que el sujeto presta atención y concentración mental.
Teniendo en cuenta todo esto, dividiremos la psicomotricidad en motricidad gruesa y motricidad fina, a fin de poder valorarlas y trabajarlas en su globalidad, pero también de modo independiente si ello nos interesa.
La motricidad gruesa hace referencia a la regulación y funcionamiento de los grandes movimientos, e incluye el equilibrio, agilidad y coordinación. Por equilibrio entendemos la consecuencia de una maduración adecuada del tono muscular: posturas correctas, simetría, capacidad de sostenerse de puntillas, a la pata coja...
La agilidad es la capacidad de movimiento (arrastrado, gateo, caminar, andar a la pata coja, saltar...), y la coordinación es la sincronía contralateral de brazos y piernas, la automatización y la adaptación a un ritmo.
La motricidad fina es la regulación y funcionamiento de los movimientos referentes al brazo, mano y dedos; y en ella tenemos en cuenta la destreza, el gesto gráfico y la creatividad. La destreza es la movilidad, elasticidad, rigidez, dominio del brazo, codo, muñeca, mano y pinza. El gesto gráfico se refiere a la maduración, dominio, relleno y direccionalidad; mientras que la creatividad es la capacidad de expresar a través del dibujo la realidad, sus fantasías y sus sentimientos.
-Percepción
Cuando hablamos del parámetro que denominamos percepción, nos referimos en todos los casos a la capacidad de integrar mensajes sensoriales en esquemas de conocimiento. Asistimos a lo largo del proceso de desarrollo del niño-a una constante evolución en su capacidad perceptiva. Las sensaciones que recibe, aun siendo las mismas, son integradas, reconocidas o identificadas de forma distinta en cada momento de su evolución.
Las variaciones que a lo largo de su evolución se presentan en su capacidad de percepción, vienen determinadas por la mayor riqueza en el número de conexiones interneuronales. El aumento de estas conexiones es consecuencia de la llegada de estímulos adecuados a cada uno de los captadores de información y del propio proceso de desarrollo.
La percepción es una relación del sujeto con el objeto; este posee sus características propias, pero el individuo lo percibe en su objetividad. En su forma de aprehender, proyecta su forma de ser, modelado por sus experiencias anteriores, el medio al que pertenece y por sus motivaciones.
El cenit de la función cerebral, en el que la percepción y su desarrollo son elementos fundamentales, es la formación de los conceptos abstractos.
El concepto es un símbolo abstracto y general que representa la suma de todos los conocimientos que poseemos sobre una serie de sensopercepciones. Permite evocar las propiedades o características del tipo de cosas o seres que simboliza y que diferencian a este tipo de otros.
Un concepto es la elaboración de un conjunto de experiencias. El soporte de los conceptos son las palabras. A cada una de las representaciones mentales que posee el cerebro le corresponde un código verbal. Pero no debemos olvidar que para llegar a la verbalización de una manera adecuada es muy importante que antes se haya formado ya una representación mental sensoperceptiva. Cuanto mayor y mejor sea el nivel perceptivo alcanzado, mayor será la posibilidad de consciencia y de vivir conscientemente el entorno y a nosotros mismos.
En el desarrollo de la percepción y la consciencia, es muy importante tener en cuenta la esfera de la emotividad, pues la carga emocional que está ligada a los estímulos, contribuye de forma importante a que estos sean percibidos e integrados de una u otra forma. Es uno de los factores importantes que contribuyen a que el concepto que tenemos del mundo que nos rodea y él nuestro propio, tengan uno u otro matiz y que las estructuras de nuestro propio yo se organicen en una u otra forma.
Dentro de la percepción, incluiremos pues el conocimiento y desarrollo del lenguaje (articulación, fluidez, expresividad, capacidad de diálogo y de comunicación), las nociones básicas (forma, color, tamaño, grosor y cantidad), y el esquema corporal (Conocimiento vivenciado de las partes del cuerpo, asimilación de las nociones básicas de organización del espacio, arriba-abajo, delante-detrás, izquierda-derecha).
-Adaptación, Ritmo y Control de inhibición.
Este parámetro hace referencia a la capacidad de adaptación de los niños-as a nuevas situaciones, a sus modos de afrontarlas y a la riqueza o pobreza de sus respuestas frente a ellas. También hace referencia a la regularidad en la consecución de sus tareas, constancia, precipitación, etc., y por último a su capacidad de obediencia.
Valoramos en este parámetro tanto los hábitos personales de aseo, higiene, orden, como los hábitos de comportamiento, las conductas y su problemática, y la convivencia con sus compañeros-as, con sus educadoras.
Si no entiendes alguna de estas palabras, primero siempre diccionario, y sino ya sabes dónde encontrarme, estaré encantada de ayudarte.
Quizá también te pueda interesar una web dónde puedes encontrar mucha información y dónde puedes encontrar otros profesionales que te ayuden: waece.com, que es la página de la Asociación mundial de Educadores Infantiles.
En cuanto a los cursos de Educación física que me comentas, no tengo ni la menor idea, y tampoco he conseguido ninguna información. Lo siento.
Espero haberte servido de ayuda, y si tienes dudas o quieres explicaciones más sencillas, ya sabes dónde encontrarme.
Muchas suerte con los niños y recuerda, mucha disciplina con mucho amor.
