¿Puedo usar Mucosan, Terbasmin o Flumil para medicar a mi hijo para la tos?
Te cuento: acabo de llevar a mi hijo de 5 años al pediatra por un cuadro de tos, y, tras reconocerlo, me dice que tiene un poco de moco en la garganta y que puede ser la causa de la tos, así que me receta Romilar para la tos y me pregunta qué jarabe para tos tengo en casa. Yo le digo que creo que Paidoterin y me dice que vale, que ese va bien (y no me lo receta). Pero al llegar a casa veo que tengo Mucosan, Terbasmin y Flumil. ¿Puedo usar alguno de los que tengo?
1 respuesta
Respuesta de fsarro
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He de decirte que no, cada uno de los jarabes que tienes en tu casa tiene una composición distinta.
Así el Romilar (el que te aconsejó tu pediatra) es un antitusígeno (actúa sobre el centro de la tos inhibiéndola, o más bien atenuándola).
El Mucosán y el Flumil tienen efecto mucolítico, esto es, ablandan la mucosidad y favorecen que se expectore. Pero su composición no es la misma aunque su efecto sí.
Y el Terbasmín tiene efecto broncodilatador, es decir, abre los bronquios para facilitar la respiración en los casos de tos asmática.
Para tu hijo te aconsejo dos cosas:
1. Beber abundantes líquidos. Es la mejor forma de que las mucosidades se ablanden, y así pueda expulsarlas con la tos con mayor facilidad.
2. De administrarle algún jarabe, yo le daría el Flumil. Aparte de ser el más inocuo (o lo que es lo mismo, el menos tóxico), actúa también ayudando a ablandar la mucosidad y a expulsarla.
No es conveniente administrar antitusígenos puros (como el Romilar) cuando la tos está causada por un aumento de las secreciones respiratorias. La tos es un mecanismo fisiológico que tiene por objeto eliminar dichas secreciones de las vías respiratorias para evitar que se acumulen y se sobreinfecten (o incluso taponen los bronquios). Sólo se debe tomar un antitusígeno cuando la tos sea "seca" o irritativa, por ejemplo ante una faringitis simple con picor de garganta, pero sin mucosidad asociada.
Además, en cuanto a sus efectos secundarios, el Romilar puede producir somnolencia, y el Terbasmín taquicardias. Mucosán y Flumil apenas son tóxicos (aunque si te lees los prospectos, todos los medicamentos tienen efectos secundarios).
Una última advertencia: fíjate bien en la dosificación adecuada a la edad y peso de tu hijo. Es fundamental; se suele tener la costumbre de decir "a un niño hay que darle la mitad de la dosis de un adulto" para cualquier medicamento, y ésto es radicalmente falso. Depende de la edad y el peso del niño, tal y como lo indica el prospecto.
Así el Romilar (el que te aconsejó tu pediatra) es un antitusígeno (actúa sobre el centro de la tos inhibiéndola, o más bien atenuándola).
El Mucosán y el Flumil tienen efecto mucolítico, esto es, ablandan la mucosidad y favorecen que se expectore. Pero su composición no es la misma aunque su efecto sí.
Y el Terbasmín tiene efecto broncodilatador, es decir, abre los bronquios para facilitar la respiración en los casos de tos asmática.
Para tu hijo te aconsejo dos cosas:
1. Beber abundantes líquidos. Es la mejor forma de que las mucosidades se ablanden, y así pueda expulsarlas con la tos con mayor facilidad.
2. De administrarle algún jarabe, yo le daría el Flumil. Aparte de ser el más inocuo (o lo que es lo mismo, el menos tóxico), actúa también ayudando a ablandar la mucosidad y a expulsarla.
No es conveniente administrar antitusígenos puros (como el Romilar) cuando la tos está causada por un aumento de las secreciones respiratorias. La tos es un mecanismo fisiológico que tiene por objeto eliminar dichas secreciones de las vías respiratorias para evitar que se acumulen y se sobreinfecten (o incluso taponen los bronquios). Sólo se debe tomar un antitusígeno cuando la tos sea "seca" o irritativa, por ejemplo ante una faringitis simple con picor de garganta, pero sin mucosidad asociada.
Además, en cuanto a sus efectos secundarios, el Romilar puede producir somnolencia, y el Terbasmín taquicardias. Mucosán y Flumil apenas son tóxicos (aunque si te lees los prospectos, todos los medicamentos tienen efectos secundarios).
Una última advertencia: fíjate bien en la dosificación adecuada a la edad y peso de tu hijo. Es fundamental; se suele tener la costumbre de decir "a un niño hay que darle la mitad de la dosis de un adulto" para cualquier medicamento, y ésto es radicalmente falso. Depende de la edad y el peso del niño, tal y como lo indica el prospecto.
Gracias por la aclaración: la verdad es que estaba un poco liada, y es que la pediatra tampoco me dejó nada claro. Lo dicho, voy a seguir tus indicaciones y, por supuesto, muchas gracias por tu rapidez.
A mi niño le recetaron mucosan..pero en casa tengo flumil...puedo darle flumil? - Carla Carbal Arteaga