Ahora se hace pis
Tengo un niño de 3 años y 3 meses, desde hace 6 meses no se hacia pis encima y lo tenia muy controlado, por la noche no.
Pero hace mes y medio(desde que le dijimos a la familia que esperábamos un 2º hijo)se hace pis encime y le da igual, no le molesta ni nada.
Hemos intentado ignorarle, castigarle sin cosas que le gusten,.. Pero no hay forma le da igual todo, y ademas se ríe cuando se lo dices.
¿Qué podemos hacer? Nosotros delante de él no hacemos alusión a su hermanito pero siempre que hay vivitas alguien le pregunta y a él no le hace ninguna gracia, además cuando me mira la barriga me dice que si la puede espachurrar;no sé que se imagina que le va a venir pero no le gusta nada, yo pensaba que los celos venían después de nacer no antes.
Pero hace mes y medio(desde que le dijimos a la familia que esperábamos un 2º hijo)se hace pis encime y le da igual, no le molesta ni nada.
Hemos intentado ignorarle, castigarle sin cosas que le gusten,.. Pero no hay forma le da igual todo, y ademas se ríe cuando se lo dices.
¿Qué podemos hacer? Nosotros delante de él no hacemos alusión a su hermanito pero siempre que hay vivitas alguien le pregunta y a él no le hace ninguna gracia, además cuando me mira la barriga me dice que si la puede espachurrar;no sé que se imagina que le va a venir pero no le gusta nada, yo pensaba que los celos venían después de nacer no antes.
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Está claro que a tu hijo le han entrado los celos desde que supo la noticia; es listo, y sabe muy bien qué significa que venga un hermanito (¿hay alguna persona de su entorno que haya tenido un bebé...?)
Lo primero que debéis hacer es tener paciencia, y no castigarle. Pensad que los niños son de por sí dependientes y necesitados de nosotros, y la noticia de la llegada de "otro" es normal que les produzca inseguridad y miedo. Y ante estas emociones algunos reaccionan "siendo más pequeños" de lo que son, para garantizar la atención de los padres (lo más importante para ellos). Se trataría entonces de que aprenda que le atenderéis más cuando haga "cosas de mayores" (comer solo, ayudar a poner la mesa, vestirse solo, ducharse solamente con supervisión, recoger sus juguetes, ...), y que no le sirve sin embargo hacer "cosas de pequeños" (hacerse pis encima, pedir que le den de comer, usar trona o biberón,...).
De momento, ignorar el que se haga pis encima (relativamente, claro, pues deberá él quitarse la ropa sucia, lavarse, volverse a vestir) y atenderle y reforzarle siempre que haga alguna de esas "cosas de mayores". No es suficiente con ignorar una cosa sino que hay que reforzar y fomentar la otra. Cuando llevéis un par de semanas haciéndolo, promoviendo todas esas tareas "de mayores", entonces decirle, por ejemplo, que ahora que ya es un poco más mayor, le vais a dejar que se acueste los sábados media hora más tarde (u otra cosa por el estilo). También, ahora que es mayor podéis jugar con él a "juegos de mayores", como el parchís, la oca o cualquier otro que se os ocurra. Como veis se trata de hacer pequeños cambios en su vida ligados todos ellos a darle valor a "ser mayor". Si sois muy constantes en hacer esto, y reforzáis adecuadamente, conseguiréis que el niño se sienta a gusto "siendo mayor" y así será más fácil que tome encantado su nuevo papel, el del "hermano mayor". Es bueno que, cuando nazca el hermano, tú te dirijas a veces a él como "mi hijo el mayor!!".
Hablad de vez en cuando del hermanito (no del bebé, sino de "tu hermano") en términos como: ... tendrás que enseñarle todas esas cosas que tú sabes hacer, porque él no sabrá nada... me tendrás que ayudar cuando le cambie el pañal, porque él se lo hará todo encima... Y si hay alguna persona cercana que haya tenido un bebé, hablar con él a ver qué le parece...
Por último, te recomiendo, como siempre hago, ver el programa de la Cuatro, Supernanny, que dan los viernes a las nueve y media de la noche.
Lo primero que debéis hacer es tener paciencia, y no castigarle. Pensad que los niños son de por sí dependientes y necesitados de nosotros, y la noticia de la llegada de "otro" es normal que les produzca inseguridad y miedo. Y ante estas emociones algunos reaccionan "siendo más pequeños" de lo que son, para garantizar la atención de los padres (lo más importante para ellos). Se trataría entonces de que aprenda que le atenderéis más cuando haga "cosas de mayores" (comer solo, ayudar a poner la mesa, vestirse solo, ducharse solamente con supervisión, recoger sus juguetes, ...), y que no le sirve sin embargo hacer "cosas de pequeños" (hacerse pis encima, pedir que le den de comer, usar trona o biberón,...).
De momento, ignorar el que se haga pis encima (relativamente, claro, pues deberá él quitarse la ropa sucia, lavarse, volverse a vestir) y atenderle y reforzarle siempre que haga alguna de esas "cosas de mayores". No es suficiente con ignorar una cosa sino que hay que reforzar y fomentar la otra. Cuando llevéis un par de semanas haciéndolo, promoviendo todas esas tareas "de mayores", entonces decirle, por ejemplo, que ahora que ya es un poco más mayor, le vais a dejar que se acueste los sábados media hora más tarde (u otra cosa por el estilo). También, ahora que es mayor podéis jugar con él a "juegos de mayores", como el parchís, la oca o cualquier otro que se os ocurra. Como veis se trata de hacer pequeños cambios en su vida ligados todos ellos a darle valor a "ser mayor". Si sois muy constantes en hacer esto, y reforzáis adecuadamente, conseguiréis que el niño se sienta a gusto "siendo mayor" y así será más fácil que tome encantado su nuevo papel, el del "hermano mayor". Es bueno que, cuando nazca el hermano, tú te dirijas a veces a él como "mi hijo el mayor!!".
Hablad de vez en cuando del hermanito (no del bebé, sino de "tu hermano") en términos como: ... tendrás que enseñarle todas esas cosas que tú sabes hacer, porque él no sabrá nada... me tendrás que ayudar cuando le cambie el pañal, porque él se lo hará todo encima... Y si hay alguna persona cercana que haya tenido un bebé, hablar con él a ver qué le parece...
Por último, te recomiendo, como siempre hago, ver el programa de la Cuatro, Supernanny, que dan los viernes a las nueve y media de la noche.