Flex Body

En lo del cálculo matemático me refería a su aplicación en Macrofotografía (aplicación de fórmulas y su resolución).
Supongo que con el manejo "físico" no tendrás problemas ya que tendrás las instrucciones. En cuanto a la aplicación de sus posibilidades en Fotografía... Cada caso es diferente. Necesitaría saber cuál es tu problema fotográfico para decirte cómo solucionarlo con el FlexBody.
No dudes en preguntar todo lo que necesites. Explícame tu problema y trataré de ser lo más claro posible.

Agradezco tu aclaración.
Mi problema con el mencionado cuerpo es que solo he tirado ha modo de prueba un par de películas polaroid, pero después intente tirar y no me sale nada. Debo estar ofuscada en algún punto y no sé en cual. Las instrucciones no vienen claras y al principio interprete y me salio bien, pero ahora nada de nada y no quiero tirar más películas a la basura. Te agradecería me guiaras paso a paso como cargarlo y tirar.
De nuevo, muchas gracias, eres muy amable.

Curioseando por Todoexpertos he visto tu pregunta sobre el Flex Body.
La verdad es que su uso (estrictamente profesional) requiere amplios conocimientos sobre el manejo de cámaras de banco óptico y estar muy puesto en técnicas de macrofotografía (lo que implica dominar el cálculo matemático)
Si lo compraste por capricho y no porque realmente te resultara imprescindible... mándame un correo a [email protected] y hablamos de precio.

No estoy muy de acuerdo, en que para manejar el Flex Body se tenga que ser un experto en cálculo matemático.
Lo que quiero es que alguine me indique su mejor funcionamiento y me he pensado muy mucho lo de venderlo y por ahora no pienso hacerlo.
Sigo insistiendo en mi interés en su manejo. Por lo que ruego si pueden darmen instrucciones, cosa que agradecería.
Saludos.

El FlexBody, básicamente, se trata de un fuelle que permite realizar desplazamientos verticales y basculamientos del plano de la película para, de esta manera, controlar la profundidad de campo y la perspectiva.
En realidad, el FlexBody funciona prácticamente como una cámara. Si le acoplamos una óptica CF o C (que son las que disponen de obturador central) y un chasis con película, ya estamos en disposición de realizar fotografías, pudiendo controlar plenamente la profundidad de campo y la perspectiva.
Los desplazamientos verticales del respaldo o, mejor dicho, del plano focal de la película, son los que nos van a permitir controlar la perspectiva. Esta aplicación nos posibilita corregir, por ejemplo, la deformación que se produce cuando fotografiamos un edificio desde un punto de vista bajo e inclinamos la cámara hacia atrás, ya que al no estar paralelos el plano de la película y el objeto fotografiado, se produce ese efecto de convergencia.
El desplazamiento puede tener un máximo de +/- 14 mm a partir de la posición cero, que nos viene indicada en el lateral izquierdo al lado de la palanca de arrastre de la película. El desplazamiento, en un sentido u otro (elevar o bajar el respaldo), lo conseguimos por medio de un tornillo micrométrico sin fin que se encuentra en el lateral derecho y cuya rueda de accionamiento dispone de un práctico nivel de burbuja.
La mayor o menor posibilidad de desplazamiento del respaldo está limitada por nuestra óptica, es decir, dependiendo de la distancia focal del objetivo, podemos realizar un desplazamiento mayor o menor. Esto es debido a la diferente cobertura del objetivo y, por consiguiente, a su capacidad para cubrir correctamente todo el formato de la película.
Para poder inclinar el respaldo disponemos de una gran rueda en el lateral izquierdo, unida a un tornillo micrométrico, y dotada de un bloqueo para impedir manipulaciones no deseadas. Al inclinar el respaldo, la cantidad de luz que llega al visor se ve afectada. Para facilitarnos la visión, se dispone de dos pantallas de corrección para utilizarlas con inclinaciones comprendidas entre menos de 10 y más de 20 grados. Si queremos una mayor comodidad de visionado y encuadre, Hasselblad ofrece un visor réflex de dos aumentos que permite ver la imagen en su posición real.
La combinación de los dos movimientos es posible, convirtiendo de este modo a nuestra cámara en una de banco óptico (¿mal llamadas de? ¿Gran formato?), lo cual nos da un juego extra de posibilidades para realzar todo tipo de fotografías, tanto bodegones como retratos o arquitectura.
Otra posibilidad que ofrece el FlexBody es su uso simplemente como fuelle y, gracias a sus 22 mm de desplazamiento, convertirlo en un práctico anillo de extensión cubriendo desde 0 hasta 22 mm.
La única operación que presenta un mínimo de complicación es el accionamiento del obturador. Lo primero que debemos hacer es montar el obturador. Para ello, giramos una ruedecilla que se encuentra en la parte superior derecha, delante del fuelle, en el sentido de las agujas del reloj. De este modo, abrimos el diafragma y luego montamos el obturador, dejándolo abierto para ver a través del objetivo. Sin embargo, ahora viene lo complicado, ya que para disparar nuestras fotos debemos efectuar dos pasos:
Primero: Pulsamos el cable disparador (imprescindible y proporcionado con los accesorios) y cerramos de este modo el diafragma y el obturador.
Segundo: Volvemos a presionar el disparador, haciendo que se abra y cierre el obturador en la velocidad que hemos seleccionado. Lo cierto es que no es excesivamente complicado, pero requiere un poco de práctica; te aconsejo que pruebes antes de realizar fotografías.
Las otras operaciones, colocar pantallas de enfoque o visores, pantallas de corrección, chasis, etc., no plantean ninguna dificultad, y mucho menos para todos aquellos que estamos acostumbrados a los equipos Hasselblad.
El FlexBody es un accesorio extremadamente versátil. Una vez salvados los primeros instantes de titubeo que supone hacerse con el control de los mandos y las posibilidades de los movimientos, la cámara resulta una herramienta ideal para fotografía de arquitectura e interiorismo. Asimismo, la utilización con el objetivo de 80 mm o con el angular de 60 mm, resulta estupenda para la realización de bodegones o cuando se requiere un acercamiento importante al motivo.
Si además de sus posibilidades para el control de la perspectiva y la profundidad de campo, lo combinamos con aros o fuelle de extensión, su resulñtado en macrofotografía es de locura.
Creo que sólo tiene un inconveniente: el precio.
Pero tú eso ya lo sabías.