Necesito consejo sobre si iniciar trámites de divorcio con un hombre con el que trabajo

Hola:
Tengo 45, llevo casada desde hace casi 20 años y tengo una chica de 15 y un niño de 10 años.
Mi matrimonio fue durante muchos años como una luna de miel. Pero creo que todo empezó a cambiar desde que tuvimos al niño. Fue un infierno pues aunque fuimos a por él de mutuo acuerdo, el realmente no quería tener más hijos. Y durante mucho tiempo, se desentendió de ellos trabajando muchísimas horas, y llegando a casa cuando ya estaban dormidos.
Esa fue la primera crisis, yo tuve una depresión de primera, pero fui saliendo. Y el poco a poco fue "haciendo más de padre". Pero no le veíamos el pelo. Me ofreció trabajo en la empresa y lo acepté. Por lo menos así lo veía más...
A continuación, empezó a tener problemas en el trabajo, y ya no le gustaba estar tanto tiempo allí. Pero en casa tampoco estaba a gusto (decía que no tenía un sitio). Compramos una casa y mientras esperamos a que la terminaran (2 años) él decía que su mal humor, su genio y sus bajones se iban a pasar cuando nos mudáramos. Lo que evidentemente no cambió nada.
Ya tenía decidido separarme, hace cinco años, cuando repentinamente se murió mi padre. Soy consciente de que él no me ayudó nada con mi duelo, es más, tenía que estar escuchando siempre sus problemas en el trabajo, y su petición continua de que tenía que ayudarle a superarlos (hacía 3 años que trabajaba con él).
Vale, fui buena persona y le soporté porque laboralmente le iba mal. Pero por fin, aunque de malas formas, logró irse de allí (una semana después me echaron a mi). Con lo cual pensé: se acabó el problema, ¡Vida nueva!
Empezamos juntos un nuevo negocio, que en estos momentos de crisis va despacio, aunque no podemos quejarnos. Pero su humor no ha cambiado en absoluto. Está siempre deprimido, quejoso, ausente, con arranques de ira. Vamos, insoportable. Por cierto, sigue tratamiento psiquiátrico aunque no es constante con las visitas al médico, con lo que no se sirve de mucho.
Bueno, esto aunque parece largo está muy resumido. Pero se reduce a que él no es feliz, y yo tampoco lo soy. Así que no me saco de la cabeza el sepárame. Pero es muy difícil, trabajamos juntos. Y los niños... Aunque a ellos ya se les escapan comentarios sobre su padre, y aunque les riño por ello, sé que tienen razón...
No se que espero que me diga, si ya lo digo yo todo... Necesito desahogarme, siento que se me escapan los años vegetando. ¿Debo resignarme a que mi vida es esto?
Gracias por leerme,
Teresa

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Pues.. la verdad sea dicha.. estas en una difícil situación por que tu vida ya casi depende de el... no por nada si no por tu trabajado y tus hijos, la idea de la separación es complicada de llevar, 1 por que estoy seguro de que le quieres y 2 por lo ya comentado. Yo te propongo que te siente tranquilamente con el y recalco lo de tranquilamente, con esto m vengo a referir que nada de peleas y tienes que hacer todo lo que sea para evitarlo y lo primero que puedes hacer es avisarlo desde el principio que no quieres pelear solo hablar e intentar hacer un esfuerzo por parte de los dos para buscar la felicidad... pronpo un viaje o podéis dedicar un día a la semana o dos para salir, hacer planes de futuro y buscar una actividad en común que ayude para manteneros unidos, la base de la pareja son los planes y la ilusiones y si las encontráis la cosa cambiara y para eso quiero que toméis asiento y habléis, dile que le quieres y que no te gustaría que la cosa fuese a peor. Si ves que la cosa después de un tiempo no cambia... y que el tampoco hace el esfuerzo... busca tu felicidad de otra manera y si crees que lo mejor es separarte pues no lo dudes, eres una persona adulta y con el suficiente criterio para saber lo que quieres y cuando las cosas no dan más de si... si ves que llega ese momento y que ya no puedes hacer nada más buscate la forma de salir bien de todo eso, te separas y buscas la felicidad por encima de todo que al fin... es lo que quieres, ser feliz. Un abrazo y si necesitas algo más o que te aclare algo no dudes en preguntar que te atenderé encantado. Un fuerte abrazo y recuerda... nunca nada esta perdido y nunca es tarde para ser feliz.
Muchas gracias por tu rápida contestación. La verdad, no pensé que pudieras darme algo de ánimo, y lo has hecho. Gracias a que tú lo ves, veo yo también que aún puedo hacer algo. Y lo voy a intentar. Voy a reunir las pocas fuerzas que me quedan y seguir tu consejo. Por que sí que le quiero y seguramente merece la pena.
Me gustaría contarte que salió bien. A ver...
Un cariñoso abrazo,
Teresa

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