Hacer turno doble para tener vacaciones

Trabajo en una tienda con jornada parcial (mañanas) y tengo una compañera, también con jornada parcial, que trabaja por las tardes. Nuestro jefe ha decidido que este año nos va a dar 15 días de vacaciones a cada una en agosto (él se va el mes de agosto entero) con la condición de que las dos hagamos jornada completa en la quincena que nos toca trabajar, para cubrir el turno de la que está de vacaciones. Y con los otros quince días "ya veremos que hacemos". Ni mi compañera ni yo estamos de acuerdo, las dos somos madres y trabajamos con jornada parcial (y en consecuencia sueldo parcial) porque no podemos trabajar más horas. En nuestros contratos pone que las condiciones laborales son según convenio. Sabemos que nuestro convenio (comercio) dice que nos tienen que dar los 30 días de vacaciones entre el 20 de junio y el 20 de septiembre, pero nos encontramos con que al jefe le importa un pito el convenio, y no hay forma de que comprenda que ni podemos hacer lo que pide, ni tiene derecho a obligarnos. Si nos tomamos las vacaciones que nos corresponden sin su autorización, ¿podría considerarlo ausencia injustificada al trabajo, y despedirnos con razón?, ¿Vamos a trabajar en nuestro horario habitual, con lo que la tienda sólo estaría abierta la mitad del horario comercial durante el mes de agosto? ¿Hay alguna medida legal que podamos adoptar? ¿Nos puedes aconsejar.

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Me parece muy bien que tu jefe coja todo el mes de agosto de vacaciones, pero los estatutos están para cumplirlos quiera o no quiera, por lo tanto, tu podrás cogerte los 15 días por la mañana, otra persona que coja, trabajará por la tarde, a los siguientes 15 días lo mismo con tu compañera, le guste o no le guste a tu jefe, de todas formas, si vierais que podría hacer algún tipo de represalia, que os diga el tema de vacaciones por escrito y con ese escrito, denunciáis en el SMAC, de tu ciudad.
Gracias por lo rapidísimo que eres.
Hasta donde dices estamos de acuerdo. La cuestión es: no va a coger a nadie, eso lo sabemos, y la comunicación de fechas de vacaciones es verbal. El problema que se nos presenta es que si él no hace nada (como sabemos que no lo hará) y nosotras no hacemos el horario extra dejando que la tienda no tenga las horas habituales de apertura, ¿qué podría pasar?
Las palabras se la llevan el viento, todo por escrito, sin esto no podréis denunciar y el tendrá, la sartén por el mango.

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