Mi pareja cambia constantemente de opinión

Te escribí hace unos cuantos meses cuándo me había separado y me furon de mucha ayuda tus palabras. Finalmente volvimos a intentar recomponer la relación.
Empezamos a hacer terapia de
Pareja y la cosa funcionó muy bien. Dejamos de discutir y nos fuimos
acercando cada vez mas y hasta pusimos fecha para casarnos y decidimos
tener un hijo (cosa que siempre habíamos postergado, principalmente por
mi causa ya que el siempre lo había deseado).
El se mudó otra vez conmigo pero esta vez a mi departamento y todo
parecía viento en popa. Aunque al principio el estaba bastante
desorganizado con sus horarios, ya que acababa de recibirse y se estaba
acomodando con nuevos trabajos, me pidió que le tuviera paciencia, ya
que siempre yo le había pedido que necesitaba mas tiempo para la pareja,
que estuviera en casa por las tardes o los fines de semana. Un poco se
fue acomodando y trataba de llegar temprano y de no ocupar fines de
semana pero al correr del tiempo volvía a ocupar todo su tiempo en otras
cosas. Cuándo yo se lo mencionaba como que se ponía un tope y reducía
otra vez las actividades para estar conmigo pero siempre volvía a lo
mismo. Hemos hablado este tema infinidad de veces en terapia de pareja,
el terapeuta nos ha dicho que es fundamental el tiempo para la pareja,
que no hay que descuidar los espacios para estar juntos y ya que
nosotros nos llevamos bien y nos gusta estar juntos, que tenemos que
capitalizar eso. Mi pareja incluso llegó a prometerme con lágrimas en
los ojos que cambiaría, que se daba cuenta de que tenía que madurar
(Porque ya no era solo que le ocupaban los días
el trabajo y el estudio, sino que se puso a tocar música con una banda)
Le dije que me parecía bien que saliera a tocar con ellos una vez por
semana com o hobby, pero cada vez mas seguido necesitaba reunirse para
ensayar, empezó a organizar conciertos para tocar en un cumpleaños,
después en su trabajo, y ya parece la historia de nunca acabar. El
último mes ocupó todos los sábados en esas actividades, hasta el punto de cancelarme cosas en común que veníamos
planeando hacía tiempo, ya que estaba esperando que se "desocupara".
Una mañana finalmente me cansé en medio de una crisis de nervios le
dije que se fuera del apartamento, que no podía confiar en el porque me
prometía cosas que después no cumplía y que no se tomaba en serio los
compromisos. El se fue sin decir una palabra y se llevó todas sus
cosas. Su única respuesta fue decirme: entonces me voy. Ese mismo día lo llamé por la noche y terminamos discutiendo, me dijo que yo lo había tratado muy mal y se negó a reconocer todas las promesas que no cumplía diciendo que yo "exageraba" al final ya no quiso seguir hablando y me corto el teléfono. Yo lo volví a llamar, le pedí por favor que habláramos y que no manejara las cosas de tan mal modo, que no tenía sentido hacer esto después de meses de terapia pero todo fue
inútil. Esta vez no sólo me cortó sino que dejo el celular apagado para
que ya no pudiera llamarlo. Y así estuvo un día entero con el teléfono
apagado, dejándome
con toda la amargura y la frustración y sin poder hablar. El día
siguiente me llamó cuándo el tuvo ganas y como yo me mantuve firme y le
dije que no podía manejarse de esa manera con esa falta de
responsabilidad y el seguía insistiendo con que la culpa la tenía yo,
que lo trataba mal y que el no iba a dejar de hacer nada para estar
conmigo, que si estaba enojado tenía todo el derecho a desconectar el teléfono,
que sentía mucho que yo me sintiera mal, pero que primero estaba el.
Finalmente me dijo que me volvía a llamar más tarde y yo le dije que si
me pensaba decir lo mismo que mejor no me llame.
De
Todas maneras me llamó después para volver a decirme lo mismo. Y
Todavía peor: que el no pensaba cambiar en nada, que siempre había sido
así y que así iba a seguir siendo y que yo era una amargada porque el
hacía muchas actividades porque disfrutaba de la vida y que no tenía por
que dejar de hacerlas. Cuándo le recordé las promesas que me había echo
(Hacía solo una semana) y todas las cosas que habíamos hablado en tarpia,
me dijo que ahora se daba cuenta que el no tenía por que cambiar, que
esas promesas las hizo pensando en mi pero que ahora pensaba en el y que
no me tenía por que dar nin guna
explicación. Que ahora iba a ser el quién pusiera las condiciones y que
ya no le interesaba seguir aguantando mis reclamos. Le corté muy
angustiada y al rato lo llame otra vez porque no quería quedarme así ni
me parecía tirar a la basura doce años de convivencia y todos los
proyectos que teníamos, pero otra vez me había desconecta do el teléfono para que no pudiera llamarlo.
Aclaro
Que no me molesta que tenga sus actividades ya que yo también las
tengo, nunca fui celosa de sus salidas, yo también trabajo todo el día y
tengo unas cuantas actividades, pero siento que no me ha respetado en
mis necesidades y que encima después me ha maltratado terriblemente. No
creo poder volver a confiar en el después de todo esto, ya que me dice
un a cosa y en pocos días me está diciendo lo contrario. Los planes de
boda quedaron por el suelo y el ni siquiera siente tristeza o culpa por
no poder hacerse cargo de sus promesas, pareciera que en lo único que
piensa es en el.
Yo tengo 36 años y el 44, ya no somos
Adolescentes ni mucho menos... Todavía no puedo creer tanto maltrato e
indiferencia, estoy muy confundida y angustiada. En general soy muy
buena para interpretar a las personas, pero siento que estuve doce años
con una persona capaz de manejarse así y todavía no lo puedo creer...
Ya
Me extendí demasiado y desde ya te agradezco por el tiempo dedicado a
leer mis palabras. Realmente necesito un consejo y una mirada imparcial.
Me siento destruida, con todos mis planes arruinados y muy
estafada emocionalmente ya que creo que no le importó nada de mi, de mi
sufrimiento ni de nuestros planes y que no se hizo cargo de nada de lo
que había dicho...
Ojalá que puedas ayudarme con algunas palabras que me ayuden a entender todo esto.

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1

Él está actuando de forma muy infantil e inmadura, las respuestas que te da por teléfono son las de un adolescente que parece difícil creer que tiene 44 años.

Es comprensible y normal lo decepcionada que te sientes.

Bueno, lo volvieron a intentar y no funcionó, hay aspectos que empeoraron como la falta de atención de él hacia ti muy a pesar de haber aprendido en Terapia que era algo importante para que estuvieran bien.

¿Qué conclusión obtienes de todo ésto?...

¿Qué aprendes al respecto?...

¿Qué quieres hacer?...

Contaron con el apoyo y lo intentaron, dieron todo de sí mismos o lo que cada uno quería dar para que la relación funcionara, y terminaron otra vez igual. ¿Qué va a pasar?, ¿Qué queda por hacer?...

El problema ahora es que parece que él ya no tiene la disposición para resolver ésto, ni siquiera para hablar contigo de forma civilizada; así difícilmente podrán llegar a un acuerdo.

Él está tomando su decisión, y es muy clara: se elige a sí mismo y a su forma de vida individual. ¿Qué vas a elegir tú?...

Recupera tu vida, continúa con tu terapia, te ayudará a enfrentar éste proceso, a cerrar el ciclo y a resolver el coraje que sientes que es normal.

Ya no te atores más con él y continúa con tu vida.

Piénsalo...

Psic. Massiel

Hola:

Gracias por tu respuesta. Creo que tienes mucha razón... el problema quizás son los sentimientos que a veces no me ayudan. Después de escribirte me ha llamado y hemos logrado hablar como dos personas civilizadas. Aunque ha aceptado su inmadurez y dice que quiere arreglar las cosas, le noto pensamientos circulares que siempre vuelven a lo mismo. Razona un poco después de escucharme pero parece incapaz de hacerlo por si mismo... la semana que viene iremos a terapia de pareja como teníamos planeado pero yo ya no me siento capaz de volver a confiar en el, mucho menos en algo tan importante como la maternidad y el casamiento. Estoy en una edad complicada, siento que ya no me queda tiempo y que todos mis sueños se desvanecen en el aire, quizás por eso tengo tantos deseos de creer que puede madurar, pero como me dijeron por ahí parece que no me ama lo suficiente como para madurar y no perderme... Otra vez gracias por tu tiempo, valoro mucho tus palabras

Una cosa es cierta, el verdadero amor nos motiva a crecer y ser mejores personas, si él no encuentra la motivación para madurar y comprometerse contigo de forma estable, entonces es porque no hay en él los sentimientos suficientes para empujarlo a eso.

De cualquier forma, piensa en algo: si se hubieran casado hace 12 o 10 años, hubiera pasado exactamente lo mismo, porque como ya te comentaba su relación fue como un matrimonio.

Los sentimientos no entienden de contratos sociales, morales o legales, ni de ese "vivamos juntos a ver si funciona para después casarnos", simplemente a partir de que empiezan a vivir juntos su unión se afianza y se crea una mayor intimidad entre ustedes, se forma ese lazo que los ata como esposos; y es a partir de ese momento en que se puede empezar a hablar de un matrimonio.

Por lo que su relación pasó por las diferentes etapas por las que pasa toda relación de cónyuges: llegó a esa etapa en que se acaba el enamoramiento y tiene que dar paso al amor, y ésto implica que ambos tienen que tener la madurez emocional para vivir un amor más serio y tranquilo, estar perfectamente ubicados en su etapa actual de vida, y tener la disposición para asumir mayores responsabilidades, así como seguir los objetivos en común, aunque ésto implique sacrificar los individuales.

Pero obviamente su relación no ha podido sobrevivir a esa etapa ni dar el paso siguiente. Realmente tu relación lleva años agonizando, y a pesar de que han hecho lo posible por recuperarla y sobrellevarla, sigue cayendo. Por lo que, tal vez, sea tiempo de que ambos acepten que su "matrimonio" no funcionó, y comiencen a dividir sus caminos.

Y en éste sentido es mejor no haber tenido hijos que sufrieran las consecuencias o hicieran más difícil la separación.

¿De quién fue la culpa?... No hay culpas, sólo responsabilidades, y fue de ambos.

En una relación todo, absolutamente todo, es responsabilidad de dos, porque ambos fueron partícipes de esa relación, y desde un inicio construyeron éste camino.

Vivieron su matrimonio, aunque nunca quisieron verlo así, por lo mismo no estuvieron preparados para vivir en Pareja, así que su relación duró lo más que podía con las condiciones que tenía. Tal vez se han aferrado más de lo necesario a ella.

Puedes pensar que no llegó a ser ese matrimonio que te hubiera gustado tener, y que a lo mejor casados hubiera funcionado, pero yo te invito a pensar: ya fue ese matrimonio que deseabas, ya lo viviste, porque realmente no iba a ser nada diferente a lo que ya fue teniendo un papel de por medio que los definiera como "marido y mujer"; fue exactamente lo que podía ser, funcionó igual que hubiera funcionado después de una boda. E igualmente se está terminando.

Asume tu proceso de divorcio, porque es precisamente eso lo que más duele: el tener que recoger las expectativas que tenías sobre tu relación y sobre la otra persona, y ahora tener que continuar tu camino sola. Y te cuestionarás: ¿Dónde queda lo que invertí: mi tiempo, mi esfuerzo, todo lo que dí?, ¿Dónde quedan las promesas y los proyectos, los sueños?, ¿Y ahora qué?, ¿Qué sigue?, ¿Qué queda?...

Lo que sigue es reconstruir tu vida hacia nuevos horizontes, buscar nuevos proyectos, y no cerrarte a nuevas posibilidades de relaciones, porque más adelante puedes encontrar eso que no obtuviste hoy.

Agradécele a ese hombre, y agradécete a ti misma, por permitirte y permitirse compartir su vida por 12 años... y continúa con tu camino.

Piénsalo...

Psic. Massiel

Muchas gracias! son muy sabias tus palabras y me han echo mucho bien. Espero ahora tener las fuerzas para salir adelante y volver a encontrar la felicidad.

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