Tribunal medico

Hola, te lanzo mi situación. Tengo 36 años y he consumido cocaína desde los 16. Ahora estoy en tratamiento psiquiátrico por esquizofrenia, por ansiedad y depresión y por transtorno mental por abuso continuado de cocaína. Llevo 19 meses con una it, y en Abril, tengo tribunal medico para INCAPACIDAD PERMANENTE.Me gustaría tu opinión sobre mi caso, pues las esperas me vuelven más loco de lo que estoy. Gracias-

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No hay una relación siempre directa entre el diagnóstico y el dictamen sobre incapacidad ya que hay que tener en cuenta varios factores, como patologías acompañante, evolución, tipo de trabajo, etc., pero está claro que, de lo que cuentas, sobre todo por el diagnóstico de esquizofrenia, sí te facilitaría el que te diesen la incapacidad permanente, sobre todo teniendo en cuenta la incapacidad transitoria de estos 19 meses.
En cualquier caso, yo te diría que no hagas depender tu estabilidad de un determinado dictamen del Tribunal, ni de otra circunstancia que tampoco dependa directamente de ti, y esto te lo facilita el tener una visión generosa sobre lo que te sucede; es decir, no mires ninguna circunstancia meramente desde el punto de vista de tus intereses superficiales, sino que míralo todo generosamente, pensando en lo que con ello puedes aportar al bien de las personas (aunque fuese una injusticia la que sufrieses); para ello, te vendría bien, y te recomiendo el tener también una vida enfocada con auténtico sentido, es decir, encaminada a hacer todo el bien que puedas con ella (y hacer el bien que puedes, es encaminarte a hacer el bien real de las personas, no sólo su bien material, por encima de tus particulares intereses). Sin duda esto mejorará tu evolución, ampliará tu visión sobre las cosas, y curiosamente te vendrá mejor en todos los sentidos, en cuanto a la salud y como persona, dado que el perseguir los propios intereses como último objetivo es lo que empobrece a uno, empeora la salud y favorece el consumo de drogas; el actuar bien de verdad, te sirve por ejemplo del mejor contrapeso si en algún momento te apeteciese consumir, o te vieses inducido a complacer a alguien en este sentido, ya que si piensas en hacerle el bien y no en complacer su interés porque te interesa, verás mucho mejor lo conveniente para el bien real de ambos; además, con un buen enfoque, también afrontarás mejor tanto la vida, como cualquier circunstancia de estrés, con lo cual, también te viene bien en cuanto a evitar otro posible motivo de recaída en la droga como sería el intentar resolver la excesiva tensión, o el intento de evasión, ante un problema (al reaccionar ante los problemas, queriendo meramente no enterarse, dado que al verse sólo desde los intereses, y al ser uno incapaz de lograr ciertos resultados que uno cree que le interesan, uno llega a verse indefenso frente a las circunstancias y la solución que se creería más fácil ante ello sería la evasión; tampoco sería infrecuente el consumo de drogas como intento de resolver la ansiedad excesiva facilitada por este enfoque); por el contrario, si se miran de otra manera los acontecimientos, ya no se recarga uno de tanta tensión, ya uno sabe lo obvio, es decir, que uno no manda en el mundo, ni manda en todo lo que sucede, sino que uno sólo puede aspirar a mandar en lo que le corresponde en cuanto a la forma de afrontar la vida, y reaccionar ante los acontecimientos que surgen (incluyendo, por supuesto, el aprender ante ellos, por si estos se han derivado de un acto equivocado propio); y esto evita el que un adulto se sienta indebidamente indefenso frente a las circunstancias ya que siempre puede aportar mucho bien, ya sabiendo de antemano, que no le corresponde el mandar en todo lo que sucede; igualmente el querer hacer algo en la vida también te serviría de contrapeso para hacer algo que simplemente te apeteciese, ya que no se evitan determinadas cosas que pueden apetecer, si la única motivación para ello son nuevamente los propios intereses.
Todo esto también te facilitará el vivir mejor la incertidumbre de lo que no dependa de ti, ya que no tendrás temor a lo que pueda surgir, y aunque emocionalmente pudiera apetecerte más un resultado que otro, podrás controlarte al respecto, entre otras cosas al saber que tú no lo sabes todo al respecto (lo que es mejor de verdad), además de que tampoco mandas en todo; además, con un buen enfoque te guiarás por tu decisión voluntaria (que no tiene por qué acompañarse, al menos al principio, de sentimiento alguno al respecto) de intentar hacer todo el bien que puedas, con lo cual, en este sentido, no sabes a ciencia cierta lo que es mejor (y no debes insistir más allá de lo que hayas procurado por considerarlo razonable, conveniente, o de justicia); se trataría de no obsesionarse con resultado alguno para ti, y esto te lo facilita el tener clara la jerarquía de objetivos, con lo cual hay que saber que todo está supeditado a un bien mayor, horizonte muy amplio en el que uno no lo sabe todo, entre otras cosas, porque ya hay muchos factores que no dependen de uno. Por supuesto que si uno obtiene un resultado injusto, su enfoque generoso puede llevarlo a trabajar en esa injusticia, pero no enfocándolo desde sus meros intereses, ni pretendiendo resultado alguno para sí, como último objetivo. En este sentido, te recomiendo no perder tiempo pensando en lo que ya no depende de ti, sino que aprovechar el tiempo en lo que sí depende; si tienes que pensar en qué hacer por tu parte en un determinado asunto, si lo vieses conveniente, te podrías poner un horario, para pensar en qué hacer por tu parte en un determinado asunto: nunca viéndote indefenso frente a las circunstancias, ya que lo fundamental, en el plano natural, siempre depende de lo que uno decida hacer.
Y si te dan la incapacidad permanente en el terreno laboral, por supuesto que esto no significa que no puedas ni debas hacer nada, sino que eso sólo se referiría a una relación laboral de un determinado número de horas, pero todo el mundo puede hacer mucho bien, y eso es fundamental para la salud.
En este sentido te dejo un blog de actitudes saludables.
Muchas gracias a ti y gracias a Dios.Ya ha pasado todo y me ha dado una incapacidad permanente total para profesión habitual. Ahora podre tener cierta tranquilidad y, en un futuro, volver a trabajar.Me ha gustado tu enfoque de las cosas, volveré a hablar contigo. Gracias.

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