Boda
¿Hola? Solo una pregunta: me voy a casar con un francés y como costumbre en Francia, el quiere que tome su apellido. ¿Es posible cambiar el apellido en españa?
1 Respuesta
Respuesta de experto2
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Te facilito esta información espero que te sirva de ayuda.
Cambio de identidad
Cástulo, Liborio, Eulalia, Celestino, Dionisio, Gervasia... Son algunos de los nombres con los que algunos padres "despiadados" bautizan a sus hijos por el simple capricho de perpetuar una absurda tradición. Disfrutar de la posibilidad de cambiarlos es un derecho de todas las personas. De igual modo, también el orden de los apellidos puede modificarse.
A la hora de elegir el nombre de sus hijos, los progenitores no siempre tienen en cuenta las penalidades que esperan al niño frente a crueles compañeros de colegio o desconocidos poco respetuosos. Pues bien, los afectados pueden solicitar por su cuenta y riesgo el cambio de nombre, aunque con algunas limitaciones y siempre que hayan cumplido la mayoría de edad.
La ley de su parte
¿La legislación recoge que se puede proceder a la adquisición de una nueva identidad? ¿Siempre qué exista causa justa y no perjudique a terceros?. La norma excluye los casos en los que se pretenda sustituir el nombre oficial por un apócope, contracción o pequeña variación. De esta forma, Demetrio podrá pasar a llamarse Antonio, pero Celestino no podría cambiar su nombre por el de Celes.
Por otro lado, desde mayo de 1999, es posible decidir el orden de los apellidos. Todo el que lo desee podrá anteponer el apellido materno al paterno. A continuación, se exponen las respuestas a algunas de las dudas que pueden surgir a los progenitores a la hora de elegir el nombre para sus "retoños", así como otras referentes a la modificación de los apellidos:
¿Es posible unir los apellidos y el nombre con alguna preposición?
Sí. Es legal anteponer la preposición "de" al apellido paterno si se trata de un nombre propio (de este modo Francisco Alonso pasaría a llamarse Francisco de Alonso, y Luis Lorenzo sería Luis de Lorenzo).
¿Se puede invertir el orden de los apellidos?
Desde 1981, cualquiera que haya cumplido los 18 años puede hacerlo, y para ello no será necesario que el resto de los hermanos, en el caso de que existan, modifiquen los suyos.
¿Se puede cambiar el apellido por el equivalente en otra lengua reconocida como oficial por el castellano?
Sí, siempre que la forma inscrita en el registro no se adecue a la gramática y fonética de la lengua correspondiente. Así, un vasco de apellido Casanueva podrá sustituir éste por Etxeberria o un catalán por Casanova.
¿Se pueden poner todos los nombres que se quiera?
No es posible. Hay que limitarse a un nombre compuesto o dos simples. El propósito de esta medida es evitar la confusión acerca de dónde terminan los nombres propios y dónde comienzan los apellidos. Los nombres como el del nieto de los Reyes de España, Felipe Juan Froilán de Todos Los Santos, están reservados a la monarquía. No obstante, siempre existe la opción de añadir el resto de los nombres que se deseen en el sacramento del bautismo, puesto que la legislación canónica no impone ninguna limitación al respecto.
¿Se puede elegir cualquier nombre?
No. Están permitidos los de personajes mitológicos, históricos o los nombres abstractos, comunes o de fantasía que no induzcan a error en cuanto al sexo. Ahora bien, quedan prohibidos los diminutivos o las variantes familiares y coloquiales (Paco, Pepe...), así como aquellos nombres que, en combinación con el apellido, resulten contrarios al decoro de la persona (como por ejemplo Dolores Fuertes, Pedro Medario, Alonso Lomillo...).
¿Están permitidos los nombres extranjeros?
Sí, siempre que no exista un equivalente onomástico usual en alguna de las lenguas españolas (un niño no podrá llamarse George, ya que su forma castellana es Jorge). Los que sientan debilidad por los nombres exóticos deberán buscar aquellos que no tengan traducción a las lenguas castellanas.
¿Se pueden modificar los apellidos?
La ley establece que aquellos que lo deseen podrán agregar o segregar palabras, trasponer o suprimir letras o acentos, eliminar artículos o partículas, siempre y cuando las uniones no excedan de dos palabras.
Cambio de identidad
Cástulo, Liborio, Eulalia, Celestino, Dionisio, Gervasia... Son algunos de los nombres con los que algunos padres "despiadados" bautizan a sus hijos por el simple capricho de perpetuar una absurda tradición. Disfrutar de la posibilidad de cambiarlos es un derecho de todas las personas. De igual modo, también el orden de los apellidos puede modificarse.
A la hora de elegir el nombre de sus hijos, los progenitores no siempre tienen en cuenta las penalidades que esperan al niño frente a crueles compañeros de colegio o desconocidos poco respetuosos. Pues bien, los afectados pueden solicitar por su cuenta y riesgo el cambio de nombre, aunque con algunas limitaciones y siempre que hayan cumplido la mayoría de edad.
La ley de su parte
¿La legislación recoge que se puede proceder a la adquisición de una nueva identidad? ¿Siempre qué exista causa justa y no perjudique a terceros?. La norma excluye los casos en los que se pretenda sustituir el nombre oficial por un apócope, contracción o pequeña variación. De esta forma, Demetrio podrá pasar a llamarse Antonio, pero Celestino no podría cambiar su nombre por el de Celes.
Por otro lado, desde mayo de 1999, es posible decidir el orden de los apellidos. Todo el que lo desee podrá anteponer el apellido materno al paterno. A continuación, se exponen las respuestas a algunas de las dudas que pueden surgir a los progenitores a la hora de elegir el nombre para sus "retoños", así como otras referentes a la modificación de los apellidos:
¿Es posible unir los apellidos y el nombre con alguna preposición?
Sí. Es legal anteponer la preposición "de" al apellido paterno si se trata de un nombre propio (de este modo Francisco Alonso pasaría a llamarse Francisco de Alonso, y Luis Lorenzo sería Luis de Lorenzo).
¿Se puede invertir el orden de los apellidos?
Desde 1981, cualquiera que haya cumplido los 18 años puede hacerlo, y para ello no será necesario que el resto de los hermanos, en el caso de que existan, modifiquen los suyos.
¿Se puede cambiar el apellido por el equivalente en otra lengua reconocida como oficial por el castellano?
Sí, siempre que la forma inscrita en el registro no se adecue a la gramática y fonética de la lengua correspondiente. Así, un vasco de apellido Casanueva podrá sustituir éste por Etxeberria o un catalán por Casanova.
¿Se pueden poner todos los nombres que se quiera?
No es posible. Hay que limitarse a un nombre compuesto o dos simples. El propósito de esta medida es evitar la confusión acerca de dónde terminan los nombres propios y dónde comienzan los apellidos. Los nombres como el del nieto de los Reyes de España, Felipe Juan Froilán de Todos Los Santos, están reservados a la monarquía. No obstante, siempre existe la opción de añadir el resto de los nombres que se deseen en el sacramento del bautismo, puesto que la legislación canónica no impone ninguna limitación al respecto.
¿Se puede elegir cualquier nombre?
No. Están permitidos los de personajes mitológicos, históricos o los nombres abstractos, comunes o de fantasía que no induzcan a error en cuanto al sexo. Ahora bien, quedan prohibidos los diminutivos o las variantes familiares y coloquiales (Paco, Pepe...), así como aquellos nombres que, en combinación con el apellido, resulten contrarios al decoro de la persona (como por ejemplo Dolores Fuertes, Pedro Medario, Alonso Lomillo...).
¿Están permitidos los nombres extranjeros?
Sí, siempre que no exista un equivalente onomástico usual en alguna de las lenguas españolas (un niño no podrá llamarse George, ya que su forma castellana es Jorge). Los que sientan debilidad por los nombres exóticos deberán buscar aquellos que no tengan traducción a las lenguas castellanas.
¿Se pueden modificar los apellidos?
La ley establece que aquellos que lo deseen podrán agregar o segregar palabras, trasponer o suprimir letras o acentos, eliminar artículos o partículas, siempre y cuando las uniones no excedan de dos palabras.
