Me separé de mi pareja después de dos años juntos. ¿Porqué no consigo olvidarlo?
¡Hola expert@! Hace tres años me sentía muy deprimido, terminé mi carrera a regañadientes y abandoné mi terapia psicoanalítica tras dos años de atenderme con mi terapeuta. Las cosas estaban muy mal y sólo nos estábamos agrediendo en su diván. Tomé unas largas vacaciones con mi familia del norte del país, me hicieron mucho bien, me sentí renovado. Regresé a casa y comencé a hacer algunos cambios, entre ellos tramitar una cirugía de bypass gástrico en uno de los hospitales públicos de mi ciudad. Todo iba bien de la mano a que decidí salir del clóset a mis 25 años de edad y confesarlo a mi padre. Él me apoyó y yo comencé a conocer chicos y salir a citas con ellos que, pertenecían a un grupo de personas que admiran o se sienten atraídos sexualmente por personas con obesidad mórbida como yo (150 kilos). Las citas eran muy livianas e inocentes, jamás llegaron a más de un café. Pero en ese entonces descubrí un site en internet con personas igual de interesadas en el mismo fetiche. Conocí el sexcam y me volví loco de felicidad al ver como los otros me miraban con mucha lujuria, no me lo creía. Pasaron algunos meses y yo bajé bastantes kilos de peso por estar en el protocolo de la cirugía; fue cuando conocí a un chico de España que me dejó cautivado, comenzamos a tratarnos y pues se dio el click entre ambos; sin importar que él confesó vivir con su mujer y su hijo pequeño. Para ese entonces yo estaba más que enganchado y decidí dejarlo pasar de largo, total era algo no real, es decir, sólo pasaba en internet. Él también dijo que no sabía como iba a reaccionar cuando estuviera más delgado, para entonces yo ya había rebajado cerca de treinta kilos, aunque nunca me operé, con la dieta y el ejercicio bastó. La "ciber relación" se fue dando más profundamente, platicábamos mucho en el chat, nos contábamos secretos e incluso él llamaba a mi casa por teléfono y se saludaba con mis familiares. Un día lo noté extraño, me dijo por fin que le había confesado lo nuestro a su mujer y una situación muy tensa se dio, porque el juraba no quererla porque ella sólo estaba con él por interés económico. Pero después de eso, las cosas cambiaron, él estaba confundido porque ella decía quererlo. Llevábamos un año de vernos casi a diario en línea con una sesión de cibersex todos los viernes. Hasta que yo empecé a presionarle para conocernos en persona. Incluso rompí con él en una ocasión anterior pero no pude durar mucho tiempo, lo necesitaba. Habíamos planeado conocernos en persona dentro de dos meses adelante, yo iría a España y me reuniría con él en Madrid. De pronto comenzaron a haber muchas inconsistencias. Le descubrí por ejemplo buscando a otras personas pa' hacer cibersex y eso me dolió mucho pero lo acepté, no le dí importancia. Faltaba un mes para encontrarnos y las cosas iban mal, discutíamos mucho, hasta que de plano el viaje se frustró porque atravesábamos la temporada vacacional de semana santa y como él no ponía fecha exacta por su trabajo, no pude reservar boletos a tiempo. Decidí dejarle, sentí que necesitaba ponerle un límite a la situación. Aunque sabía que vovería a lo mismo tarde o temprano. Pasaron apenas dos días después de eso y de pronto mi hermano se acercó a mí y me dijo que el español le estaba buscando pa' hacer cibersex a pesar de que ya habían aclarado que era mi hermano. Me sentí muy traicionado y devastado. De inmediato corté de tajo toda relación con él y decidí alejarme lo más que pude de toda esa situación. Me refugié en mi trabajo pero no podía concentrarme, las noches lo pasaba llorando, pensando en él y pidiéndole a Dios perdón por haber sido tan soberbio y retarle de la manera que lo hice. Lo extrañaba y a pesar de que iba cayendo en mentiras y engaños, me sentía con el orgullo muy herido pero lo amaba con toda el alma. Pasó un año y el pensamiento no me dejaba en paz, decidí buscarle por correo y decirle que quería quedar en buenos términos con él pa sentirme más tranquilo y en paz. Así pareció, él creía que le buscaba pa' volver a lo de antes, pero las cosas no daban más que para lo que yo pedía. HAsta seis meses más arde que hubo confrontación con mi hermano, me dí cuenta que él me tenía envidia por la relación que tenía yo con el español y por eso dio su versión como la dio. Me sentí muy confundido y además sin poder re significar a mi viejo amor. Durante el tiempo que me distancié con él, busqué seguir saliendo con otros chicos, de nuevo en el mundo real, pero algunos percibían que yo seguía muy plantado en mi antigua relación. Incluso, me acosté con tres hombres diferentes (siendo virgen con el primero), pensé que así me sentiría menos mal, pero sucedió lo contrario. Meses después, decidí buscarlo, nadie me había hecho sentir tan bien como él (ni tan mal) quizás me sentí a mano con lo que había hecho, pero con daños emocionales difícil de reparar; creí que había recibido una lección y que debía aceptar que aún lo amaba. Él me contestó de inmediato y se mostró muy emocionado, definitivamente esperaba lo mismo de antes, pero yo me mostraba muy seco y serio, ya no era como antes, me di cuenta que a pesar del tiempo pasado y aunque yo me había alejado pa' precisamente no agredirlo, había guardado mucho resentimiento en su contra, lo estaba culpando de todas las tonterías que había hecho por mi parte. La cosa fue fatal, decubrí que él me había buscado poco después de lo sucedido con mi hermano, incluso que lo hizo a través de él diciendo que quería sabe si me hallaba bien tras lo de la influenza en México. También, escribió unas entradas en su blog manifestando su dolor, que me extrañaba y que había perdido a su mejor amigo y cómplice. Total que en las escasas charlas que tuvimos, yo le confesé lo que había hecho por acá y él se molestó muchísimo, me calificó de "putón" y bueno, de ahí me agarré pa' decirle todo lo que yo sentía y de la humillación que había sentido cuando buscó a mi hermano. Tratamos de dejarlo pasar, ya cada uno sabía lo que sentía, él no dijo mucho ni volvió a reprochar absolutamente nada. Yo le propuse nuevamente reunirmos, pero esta vez en México, mi amiga me prestaba su casa en Cancún y pues le invité, le dije que por lo menos quería quitarme esta obsesión por él aunque nunca lo iba a tener para mí... Por supuesto que días después lo rechazó y dijo que él siempre estaría ahí para lo que yo quisiera. Lo volví a quitar de mis contactos y me resigné un poco más, concluí que no me quería, que cuando decía que sí sólo lo decía pa' conseguir de mí lo que él deseaba....
1 Respuesta
Respuesta de eloisa callejon fernandez
1