Bache demasiado largo.
Hola Eloisa, me dirijo a ti porque como tu he sido experto en esta página y se la ayuda que podemos proporcionar, cada uno en su rama, y ante la desesperanza que me provoca mi caso y la imposibilidad de poder pagar un psicólogo recurro a ti que seguro que me ayudas de buena fe como al resto.
Mi caso en principio no le encontré ninguna rareza o nada diferente al resto, pero, ya van muchos años en los que no me parezco nada a la persona que fui. Tengo 31 años y llevo 7 en los que no levanto cabeza en ningún aspecto, me gustaría relatarte un poco mi historia sin saturarte, si necesitaras más detalles solo tienes que preguntar. Pase de ser un niño normal con una educación bastante estricta en el seno de una familia con una madre muy severa y un padre anulado por esta, pese a que se me suponía muy inteligente según los análisis del psicólogo escolar nunca fui buen estudiante, es más creo que nunca estudie, tenia una reacción contraria a lo que con tanto ainco quería mi madre. Cuando pase al instituto pase a ser lo que se suele decir un graciosillo, sin llegar a ser un líder, el primer año fue una catástrofe, mi madre empeñada en enderezar mi falta de atención y poca dedicación a los estudios me matriculo en un instituto diferente al de mis amigos, ese año suspendí 8,8y 8 aprobando solo educación física. Intento motivarme prometiéndome ir al instituto de mis amigos, por esa época tenia un mal comportamiento y fumaba hachís, aprove todo, pero incumpliendo su palabra me mando a un colegio privado de monjas, fue doloroso pero era feliz y fue de las mejores cosas que me pasaron en la vida, las monjas fueron capaces de sacar lo mejor de mi, yo me convertí en un chico de éxito con las niñas, de ahí pase a maristas a hacer COU, una mala experiencia de clasismos pero buena en todo lo personal. De ahí a la facultad, donde también empecé a trabajar y eso mezclado con mi poco interés por los estudios acabo con el abandono de la carrera. Fueron los mejores años de mi vida, entre los 14 y los 24, donde todo el mundo quería estar conmigo, que organizara o deshiziera a mi antojo, lo hacia bien, contaba con todos, no me olvidaba a nadie, integraba a los más lejanos y disfrutaba con los míos. Era bueno en los trabajos, siempre accediendo a uno mejor, tuve una relación llemémosla seria, que no funciono porque mi amor se convirtió en fraternal, era una relación de 50 años teniendo 20, lo pase mal al dejarla y pase uno de mis primeros malos momentos por ver que sufría, en esa época cometí el error de mi vida, que he pagado con creces, fue enamorarme de la novia de mi mejor amigo, con la que tuve una relación de tres meses sin sexo y con apenas dos besos, pero había roto las reglas, en ese tiempo me di cuenta que yo solo era para ella un complemento a mi amigo, yo era el comprensivo de los buenos consejos, pero su pareja seguía siendo su pareja, puse pie en pared, era una gran época para mi, cometí el error, ya estaba hecho, seguí adelante, fue entonces cuando comenzó la caída, mi compañera de trabajo y confesora se convirtió en mi pareja, la persona más perfecta jamas conocida, por aquel entonces deje el trabajo en el que estaba para montar una empresa propia, que también fue bien, pero la persona perfecta que había conocido resulto no ser tan perfecta, pase dos años de mi vida, entre deudas al banco, embarazos falsos, y sobre todo los intentos de suicidio si la dejaba, ademas de la amenaza de contar mi gran error. Evidentemente, un día tuve que salir de allí, no se suicido, era de imaginar, pero si que contó mi secreto, resulto ser una persona diagnosticada con trastorno de identidad, lo sabían los padres que nunca me dijeron nada, tenia una vida conmigo y otra fuera de casa, omito casi todos los escabrosos detalles porque necesitaría 2 días. Evidentemente las consecuencias de esto fueron muy graves, el chico de éxito que tenia un grupo de amigos excelente formado alrededor tubo que ser el que saliera fuera de este, la mayoría me apoyaron, pero yo no me sentía digno de ir con ellos, pase mucho tiempo solo, sumido en un hundimiento por lo pasado y por lo que vendría, la relación con esta chica lastro mucho mi trabajo, yo perdí el animo por trabajar, empecé a ir a un bar a hablar con todos de "nada", no soportaba la soledad, pero tampoco era capaz de intimar con nadie, no tenia fuerzas para despertar por la mañana. Me volví perezoso, perdí el ingenio, la gracia, y la iniciativa, mi carácter se volvió agrio. Pase dos años sumidos en la mierda, no quería conocer mujeres, pero hay veces que se cruza un angel y yo conocí uno, la que ha día de hoy fue mi más corta y mejor relación, seguramente no hubiera tenido futuro, pero que buena fue, si no fuera porque a los pocos días de empezar a salir juntos en un viaje se acostó con un amigo. Nunca me hubiera enterado, pero cuando mejor nos iba sintió que debía decírmelo, nunca lo pude soportar, estaba en el momento más bajo, me ayudo a salir, pero me hundió en lo más hondo, ya no quería confiar en nadie. Pasaron 3 años más en los que no he tenido la más mínima intimidad con mujeres, solo sexo, no he dejado que nadie me conozca, deje de ser la persona que sus parejar le decían que era la persona más increíble del mundo, a la que sus amigos le decían que con mi comportamiento en pareja provocaba que sus parejas quisieran los mismos detalles, lo hacia bien, era feliz, pero se acabo. Me hundí aun más, reaccionaba mal ante todo, había chicas que me gustaban, pero me alejaba porque pensaba que no seria capaz de hacer feliz a nadie, el trabajo iba de mal en peor, a la crisis se unió mi falta de iniciativa, mi pereza, mi incapacidad de afrontar los problemas. Volví a vivir con mis padres, a los que no les daba una alegría, mi comportamiento en casa era vago y independiente, vivo en una casa de 9m2 que es mi habitación, apenas me relaciono con ellos y eso que tengo una admiración tremenda por mi padre y he aprendido a valorar la buena fe de mi madre pese a no hacerlo bien. Conocía a una chica, vecina de una casa que estaban construyendo mis padres, 2010 fue un buen año, aprendí a convivir con la crisis, a animarme, a disfrutar otra vez de mis amigos que siempre estuvieron. Fue un gran año, me encontraba con fuerzas, pensé que eran historias los 5 años sumidos en lo más hondo, pero no, comencé la relación con esta muchacha encantadora, le costaba implicarse, y yo no podía soportarlo y solo hacia reclamarle, tenia miedo a un fracaso, y fracaso, decidió implicarse y fue mejor, pero otra vez la noto distante y todo me parece un agravio comparativo, me siento que no estoy arriba en su orden de prioridades todo lo que hace o dice le encuentro un pero, estoy igual de hubndido otra vez, y la verdad es que no me he sentido apoyado por ella y esto solo ha provocado más irritación de mi parte, pensaba que esta persona me ayudaría a salir y a quitarme los miedos, pero tampoco, todo lo estropeo y comprendo que por más hundida que este una persona no se puede esperar que alguien este apoyándote al 200% la...
Mi caso en principio no le encontré ninguna rareza o nada diferente al resto, pero, ya van muchos años en los que no me parezco nada a la persona que fui. Tengo 31 años y llevo 7 en los que no levanto cabeza en ningún aspecto, me gustaría relatarte un poco mi historia sin saturarte, si necesitaras más detalles solo tienes que preguntar. Pase de ser un niño normal con una educación bastante estricta en el seno de una familia con una madre muy severa y un padre anulado por esta, pese a que se me suponía muy inteligente según los análisis del psicólogo escolar nunca fui buen estudiante, es más creo que nunca estudie, tenia una reacción contraria a lo que con tanto ainco quería mi madre. Cuando pase al instituto pase a ser lo que se suele decir un graciosillo, sin llegar a ser un líder, el primer año fue una catástrofe, mi madre empeñada en enderezar mi falta de atención y poca dedicación a los estudios me matriculo en un instituto diferente al de mis amigos, ese año suspendí 8,8y 8 aprobando solo educación física. Intento motivarme prometiéndome ir al instituto de mis amigos, por esa época tenia un mal comportamiento y fumaba hachís, aprove todo, pero incumpliendo su palabra me mando a un colegio privado de monjas, fue doloroso pero era feliz y fue de las mejores cosas que me pasaron en la vida, las monjas fueron capaces de sacar lo mejor de mi, yo me convertí en un chico de éxito con las niñas, de ahí pase a maristas a hacer COU, una mala experiencia de clasismos pero buena en todo lo personal. De ahí a la facultad, donde también empecé a trabajar y eso mezclado con mi poco interés por los estudios acabo con el abandono de la carrera. Fueron los mejores años de mi vida, entre los 14 y los 24, donde todo el mundo quería estar conmigo, que organizara o deshiziera a mi antojo, lo hacia bien, contaba con todos, no me olvidaba a nadie, integraba a los más lejanos y disfrutaba con los míos. Era bueno en los trabajos, siempre accediendo a uno mejor, tuve una relación llemémosla seria, que no funciono porque mi amor se convirtió en fraternal, era una relación de 50 años teniendo 20, lo pase mal al dejarla y pase uno de mis primeros malos momentos por ver que sufría, en esa época cometí el error de mi vida, que he pagado con creces, fue enamorarme de la novia de mi mejor amigo, con la que tuve una relación de tres meses sin sexo y con apenas dos besos, pero había roto las reglas, en ese tiempo me di cuenta que yo solo era para ella un complemento a mi amigo, yo era el comprensivo de los buenos consejos, pero su pareja seguía siendo su pareja, puse pie en pared, era una gran época para mi, cometí el error, ya estaba hecho, seguí adelante, fue entonces cuando comenzó la caída, mi compañera de trabajo y confesora se convirtió en mi pareja, la persona más perfecta jamas conocida, por aquel entonces deje el trabajo en el que estaba para montar una empresa propia, que también fue bien, pero la persona perfecta que había conocido resulto no ser tan perfecta, pase dos años de mi vida, entre deudas al banco, embarazos falsos, y sobre todo los intentos de suicidio si la dejaba, ademas de la amenaza de contar mi gran error. Evidentemente, un día tuve que salir de allí, no se suicido, era de imaginar, pero si que contó mi secreto, resulto ser una persona diagnosticada con trastorno de identidad, lo sabían los padres que nunca me dijeron nada, tenia una vida conmigo y otra fuera de casa, omito casi todos los escabrosos detalles porque necesitaría 2 días. Evidentemente las consecuencias de esto fueron muy graves, el chico de éxito que tenia un grupo de amigos excelente formado alrededor tubo que ser el que saliera fuera de este, la mayoría me apoyaron, pero yo no me sentía digno de ir con ellos, pase mucho tiempo solo, sumido en un hundimiento por lo pasado y por lo que vendría, la relación con esta chica lastro mucho mi trabajo, yo perdí el animo por trabajar, empecé a ir a un bar a hablar con todos de "nada", no soportaba la soledad, pero tampoco era capaz de intimar con nadie, no tenia fuerzas para despertar por la mañana. Me volví perezoso, perdí el ingenio, la gracia, y la iniciativa, mi carácter se volvió agrio. Pase dos años sumidos en la mierda, no quería conocer mujeres, pero hay veces que se cruza un angel y yo conocí uno, la que ha día de hoy fue mi más corta y mejor relación, seguramente no hubiera tenido futuro, pero que buena fue, si no fuera porque a los pocos días de empezar a salir juntos en un viaje se acostó con un amigo. Nunca me hubiera enterado, pero cuando mejor nos iba sintió que debía decírmelo, nunca lo pude soportar, estaba en el momento más bajo, me ayudo a salir, pero me hundió en lo más hondo, ya no quería confiar en nadie. Pasaron 3 años más en los que no he tenido la más mínima intimidad con mujeres, solo sexo, no he dejado que nadie me conozca, deje de ser la persona que sus parejar le decían que era la persona más increíble del mundo, a la que sus amigos le decían que con mi comportamiento en pareja provocaba que sus parejas quisieran los mismos detalles, lo hacia bien, era feliz, pero se acabo. Me hundí aun más, reaccionaba mal ante todo, había chicas que me gustaban, pero me alejaba porque pensaba que no seria capaz de hacer feliz a nadie, el trabajo iba de mal en peor, a la crisis se unió mi falta de iniciativa, mi pereza, mi incapacidad de afrontar los problemas. Volví a vivir con mis padres, a los que no les daba una alegría, mi comportamiento en casa era vago y independiente, vivo en una casa de 9m2 que es mi habitación, apenas me relaciono con ellos y eso que tengo una admiración tremenda por mi padre y he aprendido a valorar la buena fe de mi madre pese a no hacerlo bien. Conocía a una chica, vecina de una casa que estaban construyendo mis padres, 2010 fue un buen año, aprendí a convivir con la crisis, a animarme, a disfrutar otra vez de mis amigos que siempre estuvieron. Fue un gran año, me encontraba con fuerzas, pensé que eran historias los 5 años sumidos en lo más hondo, pero no, comencé la relación con esta muchacha encantadora, le costaba implicarse, y yo no podía soportarlo y solo hacia reclamarle, tenia miedo a un fracaso, y fracaso, decidió implicarse y fue mejor, pero otra vez la noto distante y todo me parece un agravio comparativo, me siento que no estoy arriba en su orden de prioridades todo lo que hace o dice le encuentro un pero, estoy igual de hubndido otra vez, y la verdad es que no me he sentido apoyado por ella y esto solo ha provocado más irritación de mi parte, pensaba que esta persona me ayudaría a salir y a quitarme los miedos, pero tampoco, todo lo estropeo y comprendo que por más hundida que este una persona no se puede esperar que alguien este apoyándote al 200% la...
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Respuesta de eloisa callejon fernandez
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