Adaptación gato

Hola, como amante de los gatos, quería hacerle una consulta, tenemos una gata de 2 años, es la reina de la casa, celosilla, muuuuy traviesa y cazadora, pero por lo demás, noble y cariñosa.
No ha tenido contacto con más animales, han entrado un par de veces gatos al jardín, de los que ha ''pasado'', y solo con uno se ha llevado mal, el otro gato le buscaba pelea y ella enseguida huía a casa a esconderse y le daba miedo salir después, pero a los días se le olvidaba. De primeras parece poco agresiva (aunque es lo que le digo, solo ha contactado con un par de gatos y de lejos)
Estamos pensando adoptar un perrito cachorro, de unos 3 meses, de tamaño pequeñín (es una mezcla de chiguagua) pero nos da miedo la reacción del gato...
He leído en internet opiniones muy variopintas.
El veterinario dice que con ''naturalidad'' no tiene que existir problema, pero nos da mucho miedo que ella por temor, o por celos se escape, o le pase algo.
Ella tiene una habitación en el sótano solamente para ella, y durante el día vive en esa habitación y en el jardín, no sube a la casa para no llenarlo todo de pelo.
Habíamos pensado dejar al perro los primeros días en la casa y que ella siga con su vida normal, y meter al cachorro en el transportín todos los días un ratito y sacarlo al exterior o bajarlo al cuarto de la gata sin sacarlo, y que así se vayan conociendo antes de dejarlos a los 2 sueltos...
¿Algún consejo con los gatos? ¿Tiene experiencia en el tema este en concreto? ¿Piensa qué es mala idea adoptar al perrito?
Estamos muy dubitativos, pues no queremos problemas de convivencia y adoramos a la gata así que esperamos contestación. Muchas gracias y un saludo.

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La idea que has tenido es muy buena, no es buena idea presentarlos de golpe porque si se llevan mala impresión después costara mucho hacerles cambiar de idea, la idea es que se conozcan sin verse, es decir por el olor, te recomiendo dejar al perro por la casa estando la gata en otra habitación y después sacar a la gata y esconder al perro, que se vayan acostumbrando al olor de cada uno, otro día bajas al perrito al sótano y escondes la gata que ella vea que ese ya no es su territorio exclusivo.
También iría muy bien coger una mantita del perro otra del gato y intercambiarlas, que la gata tenga la del perro y el perro la de la gata, para acostumbrarse.
Así unos cuantos días hasta hacer lo que me dijiste del trasportin, esto del transportín lo haría hasta que no mostraran ninguna clase de agresividad, Una vez encerrado al gto, dar de comer a los animales a ambos lados de la puerta de la habitación del gato, los primeros días ponerlos más alejados e ir acercándolo poco a poco, hasta pegarlos a la puerta.
Así lograremos que relacionen algo agradable (comer) con los olores del otro.
El siguiente paso es sujetar la puerta con una cuña, entreabrirla un poquito y permitir que se puedan ver mientras comen.
Durante la primera semana en la que se produzca el contacto, mientras el gato esté en el mismo espacio el perro ha de estar sujeto, lo mejor es mantenerlo atado con la correa.
Dale a tu perro la orden de siéntate, quieto, o similares, con correa y bozal si es que lo precisa, y ofrécele una golosina cuando se porte bien en presencia del gato.
Además, que otra persona entre a la habitación con el gato en brazos y se siente al otro lado de la habitación.
Repitamos este paso durante un tiempo, hasta que el perro y el gato se muestren tranquilos, sin signos de miedo o agresión. Al principio, mantener al perro atado con la correa y premiarlo cuando esté calmado. Al gato también hay que premiarle para que vea al perro como aceptable.
Durante el tiempo que el gato esté en la habitación, debes atraer la atención del perro hacia ti y no dejar que fije su mirada en el gato. Al principio, los dos deberán estar en los extremos opuestos de la habitación. Mejor muchas visitas cortas (de 2 o 3 minutos) que pocas visitas largas.
Repetir los pasos de este apartado hasta que ambos toleren la presencia del otro. Es decir, hasta que se les vea tranquilos, sin signos de agresividad ni huida.
Una vez se toleren, deja que el gato explore libremente la habitación de nuevo, mientras el perro está atado con su correa y su atención centrada en ti, no en el gato. Otra vez, hay que premiar la calma del perro, mimarlo, recompensarlo.
Lo más importante es la paciencia, lo bueno que tienes es que el gato tiene su propia zona, con lo cual podéis realizar todo el proceso sin prisas, no intentes forzar las cosas y sobretodo los animales son muy celosos dedicales un tiempo exclusivo a cada uno de ellos.
Otra cosa importante que se me olvidaba, durante todo el proceso que nadie este nervioso o con miedo de lo que pueda pasar, los animales captan muy bien, las energías de las personas, si ven que vosotros estáis nerviosos pensaran que algo malo pasa, hay que estar relajado y confiado de que todo va bien.

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